Sainz abandonó tras 31 vueltas: “Otra oportunidad perdida”
El piloto madrileño sufrió un fallo mecánico en su Toro Rosso en un circuito (Sakhir) en el que podía haber estado entre los cinco primeros.
Le cuesta hablar a Carlos Sainz, hace un largo silencio hasta que sale la primera frase. Son esos momentos en los que se nota la escuela, su educación, su familia, esos en los que los periodistas somos una molestia, pero el chaval hace que no se note.
Abandono, el primero del año ya en la segunda carrera, y en un año en el que sabe que las pruebas iniciales son vitales para él, para hacer algo grande. Sergio Pérez le destrozó la carrera. Así explicaba Sainz lo que le había pasado: “Una primera vuelta muy loca, eso sí es seguro, primero porque ya iba yo con los blandos y los demás con superblandos y en esas vueltas tienes menos grip, pero hice una buena salida y gané alguna posición, pero nada a final de recta me protegía de Button creo, de uno de los McLaren y ha llegado Checo desde ningún sitio. Y en fin… ha roto su alerón, ha pinchado mi rueda y ahí se acabó la carrera”.
Porque no es solo el pinchazo sino los problemas que hubo después. “Sí, tenía todo el fondo plano dañado, están haciendo cálculos los ingenieros de lo que supone eso, pero no tenía carga aerodinámica ninguna y no podía hacer nada”, resume.
Disgustado, enfadado está el piloto. Normal. Porque aquí en Bahrain confiaba en estar entre los cinco primeros. “Estaba claro que era un buen sitio, por eso yo estaba positivo antes de la carrera porque era una buena oportunidad de hacer buenos puntos y que te pase eso en la primera vuelta no tiene sentido porque teníamos una buena oportunidad aquí de hacerlo bien y destacar y no ha podido ser”. Le animan los periodistas, en un intento de enviar ánimos de sus aficionados. ¿Cómo se viene arriba uno después de un resultado así? Sainz sigue con la cabeza baja, pero la levanta en la mesa en la que está junto a su padre y los dos periodistas. “Mañana se me pasa, pero dejarme que hoy esté cabreado”. Malo sería si no lo estuviera…
Ahora llega el GP de China y allí intentará aprovechar las virtudes del chasis del Toro Rosso en las curvas rápidas, aunque la larga recta del trazado de Shanghai le puede hacer perder ritmo pese al motor Ferrari. Pero esa, será otra historia…