Alonso le pide correr a la FIA tras los libres y se lo niegan
El asturiano tuvo una reunión con Ron Dennis, Bernie Ecclestone y el médico de la FIA en la que expresó su voluntad de participar en la prueba.
Durmió bien, muy bien, mejor que en cualquier otro de los días desde su accidente en Albert Park, se levantó temprano, desayunó y a eso de las once de la mañana estaba jugando a la Play Station en la habitación de su lujoso hotel de Bahrain. Llegó al circuito sobre la una aproximadamente vestido de calle con ropa de su patrocinador Oakley acompañado de su fisioterapeuta Fabrizio Borra. Decía el italiano que la mayor prueba de que Fernando Alonso quería correr aquí era su séquito y es que al asturiano le acompañan además de Fabri, su amigo Alberto Fernández Albilares, su manager Luis García Abad y su hermana y doctora Lorena Alonso. “No hemos venido aquí de vacaciones… a Bahrain… sino a ayudar a Fernando, a trabajar”, decía. Finalmente no pudo ser, llegó justito Alonso a Bahrain, con dolores fuertes, pero con muchas ganas de correr y dispuesto a soportar los dolores, por supuesto también los de los cinturones y la presión que pudieran hacer sobre su pecho. Pero, como decíamos ayer… la cuestión era otra y el peligro radicaba en lo que pudiera pasar con el pulmón y el corazón del asturiano ante un posible nuevo golpe.
Pero… Así las cosas, Fernando se pasó el día ayudando al equipo, comprobando como funcionaban las mejoras y pendiente de todo en el muro y el box de McLaren. El asturiano entraba en el hospitality de su equipo justo cuando Vandoorne se hacía la foto oficial con decenas de periodistas presentes. Después en los libres estuvo con los ingenieros, mecánicos, instruyendo a su joven compañero.
Pero el astur cada vez se encontraba mejor. Después de unos días en los que no terminaba de arrancar, de cierto estancamiento en su estado, hablaba con un grupo de amigos de que estaba mucho mejor y podía mover brazos y tronco sin que le doliera nada.
Ya de noche en Sakhir, después de los segundos libres y con el tercer puesto de Button, en la torre de control vimos una reunión entre Bernie Ecclestone, Fernando Alonso, Ron Dennis y el médico de la FIA, Jean Charles Piette. Según nuestras informaciones el asturiano pretendía que le dejaran correr, que estaba bien y preparado. Incluso vimos en algún momento a Dennis discutiendo con el galeno francés de la FIA, también hablando quizá del trato que dieron a Fernando en un primero momento en Australia.
Ecclestone se fue pronto y después de la charla con Ron también el médico, pero Fernando siguió un rato más dentro de esa torre. A la salida se dirigió con Dennis hasta su hospitality donde estuvo hablando con el máximo responsable de McLaren y con Luc, el doctor del equipo durante unos minutos. Fernando quería correr y, claro está, la FIA no le dejó. El asturiano estaba dispuesto a asumir el dolor y los riesgos que tiene su presencia en el coche ahora mismo por estar en la pista. Estaba aún a tiempo, ya que solo la sesión de clasificación es necesaria para disputar la carrera. Pero de nuevo los médicos no le dejaron y su presencia sigue siendo duda para China, aunque vistas las ganas del astur, sino pasa nada extraño, habría que darla por segura. Fernando, en cualquier caso, no insistió demasiado pensando en el esfuerzo que su compañero Stoffel Vandoorne había hecho viajando desde Japón para participar en el gran premio.