Alonso: “Me quedan unos años para poder ganar en Singapur”

Pelo largo, barba clásica, Fernando Alonso llega a la cita con AS en el pit lane de Singapur con el gesto cansado y gafas de sol oscuras que contrastan con la noche de Marina Bay. Aquí ha logrado cinco podios y dos victorias. Lo recordamos con él caminando por la recta de meta mientras los mecánicos trabajan en el box de McLaren Honda.

—Singapur es un circuito que no perdona, con los muros muy cerca. Unos pasan lejos de las protecciones, otros más cerca y después está Alonso…

—No sé, no sé…

—Se lo digo yo que lo veo desde hace cinco años.

—Es posible que tenga razón, es un momento en el que se ve un poco cómo va cada uno de buenas a primeras. Es una teoría válida, todas lo son en el fondo. Pero en realidad, cuando hay que juntarse de verdad con los muros es el sábado sobre todo, porque luego el domingo es muy complicado adelantar. Es fundamental ir deprisa el viernes porque genera confianza y dar muchas vueltas te hace coger más riesgos después.

—Llega a la carrera nocturna en su regreso a McLaren con pocas posibilidades. ¿Qué hubiera hecho con el McLaren de 2007 en este circuito?

—Ir muy rápido seguro, lo hubiéramos hecho bien, sí.

—¿Es de sus pistas favoritas?

—Sí, la verdad es que es un circuito que se me da bien, se adapta a mis cualidades y he logrado dos victorias y cinco podios. Creo que el que más junto a Vettel, pero he tenido también buenos coches aquí que me han permitido ganar, igual que los han tenido otros…

—En este circuito el tanto por ciento coche-piloto favorece un poco más el factor humano. ¿O es una leyenda?

—No lo sé realmente, depende del momento, pero igual sí es posible que si tienes más confianza puedas ir mejor, pero aquí no va a ganar un Manor, un Toro Rosso o nosotros por muy circuito de noche o urbano que sea.

—La primera vez que se corrió aquí fue en 2008 y primera victoria, pero con polémica. ¿Qué recuerdos tiene de aquel fin de semana?

—Tengo muy buenos recuerdos de aquella victoria, sí, era la primera carrera de noche y todos estábamos un poco expectantes, con la curiosidad de saber qué iba a pasar y cómo tendríamos que pilotar, pero fue un fin de semana muy bueno en el que siempre fuimos rápido y después hubo un poco de polémica, sí.

—Un poco bastante, pero usted siempre dijo estar al margen de todo.

—Al margen sí, fue un episodio raro digamos, porque una vez nos pusimos primeros nos marchamos a 30 segundos o en la Q2, cuando se nos rompió el coche, ya había sido primero en la Q1. Por tanto, no es que hubiera una circunstancia y ganáramos por eso.

—Hablaba antes del factor humano. Hizo podio en 2009 aquí con un Renault muy pobre, sería como un Sauber ahora o así, ¿no?

—Sí, fue una bonita sorpresa porque no habíamos sido competitivos en todo el año y aquí la verdad es que fuimos bien. Mi compañero no pasó de la Q1 y yo acabé en el podio, así que fin de semana positivo.

—Después llegó 2010, una de sus mejores victorias con ‘Grand Chelem’ incluido y ganando a Vettel y su Red Bull.

—Sí, fue una de las mejores victorias, es cierto. Además, estábamos luchando por el título con Vettel y Webber y se nos ponía todo muy bien, además logré la pole y ser líder en todas las vueltas de principio a fin. Fue un fin de semana muy bonito, muy emocionante en todos los sentidos.

—Le pregunté qué sentía y me dijo, lo contrario de cuando pierdes. Ahora llega sin posibilidades de ganar. ¿Tiene fe, ya no le digo confianza, en volver a ganar en Singapur?

—Sí, me quedan unos cuantos años por intentarlo y para poder ganar aquí. Este año no se puede, pero cuando pasa esto hay que redefinir objetivos e intentar entrar en la Q3 o en los puntos, ese es el objetivo ahora.

—Suerte, Fernando.

—Muchas gracias, siempre se necesita.