"La evolución neurológica de Jules no es la que nos gustaría"

Confianza en que ocurrirá lo que se desea. Eso es la esperanza. Y la de la familia Bianchi confluye en un mismo pensamiento, que Jules salga adelante tras su accidente en Japón del pasado octubre. Su padre, Philippe, ha concedido una entrevista en 'Canal + Francia', en la que escucharle es duro para todos aquellos que comparten la ilusión de que el bravo piloto francés vuelva. "Nos encontramos en una situación de estancamiento porque la evolución neurológica de Jules no es la que nos gustaría que fuera. Cada noche dormimos con el teléfono al lado y cuando nos levantamos por la mañana pensamos en la vida de Jules, pero también en la muerte, porque tenemos que aceptar la situación de que pueden ocurrir muchas cosas. Es horrible. Creo que todos nosotros dejamos de vivir ese 5 de octubre, es algo para lo que no estás preparado, nuestra vida se paró de alguna manera".

La realidad es muy dura, pero Philippe se agarra al ejemplo de lucha que está protagonizando su hijo para no perder las fuerzas: "Jules está vivo y creo que eso es lo más importante para nosotros. Está luchando, seguro, con las herramientas que tiene, con su fuerza física sobre todo. No estoy seguro de que neurológicamente él tenga la posibilidad de hacer muchas cosas, pero el hecho de verle pelear nos da mucha fuerza. Es importante para nosotros, y mientras hay vida, hay esperanza. Cada día es muy difícil, pero Jules sigue ahí, aún con vida, y eso nos permite encontrar la motivación para seguir adelante".

El apoyo que están recibiendo ha calado hondo en la familia Bianchi y Philippe, además de agradecerlo, reconoce que es aire positivo que les ayuda: "Todas las personas que piensan en él le dan energía y creo que él siente eso. Es muy bonito, estamos muy agradecidos por todos los mensajes porque Jules no era Michael Schumacher, pero ver todo este apoyo es genial. Al menos para Jules es importante y se lo decimos cuando le vamos a visitar, le decimos que tiene mucho apoyo, que todo el mundo le quiere y que está siendo reconocido como un gran piloto y un gran hombre".

En el fin de semana de Mónaco es inevitable acordarse de cuando hace sólo un año, Jules vivió su mejor día como piloto de carreras al puntuar en F-1 con un Marussia. Así lo recuerda, su progenitor: "Creo que fue la culminación para Jules, su sueño era puntuar en F-1 y lo logró con Marussia. Estuve allí con él en Montecarlo, tuve la suerte de ser el primero al que abrazó al final de la carrera, son momentos extraordinarios. En mi cabeza, conservo su imagen saliendo del coche, cuando vino a abrazarme y me dijo que era feliz. Estaba realmente muy contento".

Por último, Philippe, cerró la entrevista con una frase que muestra la entereza y serenidad de este hombre ante la complicadísima situación de su hijo: "Tiene que haber una solución para Jules, no creo que estar en una cama de hospital sea lo que quiera. No es su vida, ni es lo que queremos para él tampoco. Ahora tenemos que seguir esperando y ver lo que pasa".