Podio de Juncadella tras la exclusión del vencedor Ekstrom

Las calles de la histórica ciudad de Nuremberg han ofrecido una emocionante carrera y extraña carrera del Alemán de Turismos. En la única cita urbana del calendario 2013, los 22 pilotos que componen la parrilla han ofrecido un enorme repertorio de adelantamientos y estrategias en el ratonero y pequeño trazado germano, pero con varios protagonistas con nombre propio aunque quizá el más trascendental para la carrera fue el de Martin Tomzcyk.

Su abandono por un toque contra el muro dinamitó las estrategias adelantando la segunda parada obligatoria para una gran mayoría de pilotos que a la postre marcó la práctica totalidad de los  ocupantes del podio dando un vuelco absoluto a la parrilla de salida.

Precisamente esa puesta en acción tuvo un nombre por encima del resto, el de Roberto Merhi. El piloto de Benicassim ganó siete posiciones en la primera vuelta, y en el sexto giro, previa salida de un Safety Car, el de Mercedes ya iba sexto en una exhibición de pilotaje que demuestra sus prodigiosas manos al volante. Es decir, una ganancia de quince plazas tras haber salido 21º en parrilla.

Finalmente Merhi tras subidas y bajadas vertiginosas en la clasificación merced a los distintos giros estratégicos logró terminar sexto, su mejor puesto en el certamen y la tercera vez que entra en el top ten que da derecho a los puntos, todas este año..

Otro que sumó un gran botín fue Dani Juncadella. El catalán, que salía séptimo, tuvo una mala puesta en acción lastrado por un cerrojazo y un pequeño toque que le retrasó hasta la 13ª plaza, pero el de Barcelona no se puso nervioso, cambió su planteamiento de carrera para lograr un sensacional cuarto, basado en un ritmo frenético y constante de carrera, a un paso del podio y beneficiado al final por el accidente en la penúltima vuelta entre Paffett y Mortara que le precedían.

Horas más tarde ese cuarto pasó a ser tercero tras ser descalificado el ganador, Mattias Ekstrom. El de Audi fue sancionado ya que vulneró las normas del parque cerrado. Durante la celebración del éxito y antes de subir al podio fue rociado con agua por miembros de su equipo con intención, según parece, de pesar más e incluso algunas fuentes afirman que su padre le metió una botella en el bolsillo. 

Así pues, Juncadella logró el segundo podio de la historia para un español en el DTM, tras el que firmó Miguel Molina en Hockenheim en 2011, y el canadiense Wickens se alzó con el triunfo segudi por el germano Vietoris. Por su parte, Miguel Molina sólo pudo ser 13º. En la general, el alemán Rockenfeller rompe el empate en el liderato al ser quinto justo por delante de su gran rival, el canadiense Spengler. Próxima cita, 4 de agosto en Moscú.