"Quiero ser compañero de Alonso, no me da miedo"

Es un chico feliz, de esos que saben lo que quieren y están en el lugar oportuno y el momento preciso para conseguirlo. Sergio Pérez va paso a paso, en su primer año está dejando detalles de futuro genio, una parada en Australia, casi vuelta rápida en Japón... y su futuro pasa por uno de esos equipos que le permitan ser campeón. Ferrari aparece en el horizonte, aunque para ver al mexicano de rojo aún deben pasar muchas cosas. El talento lo tiene, la madurez también. Y si importa algo, además es buena gente. Ayer, el piloto de 21 años, habló con AS en Corea del Sur.

Primera temporada en la F-1 y se ha convertido en una de las sensaciones del año...

Está siendo una buena temporada, difícil, en la que han pasado muchas cosas y en la que en varias ocasiones hemos podido llegar a los límites del coche y creo que podemos llegar en una buena posición para el segundo año en la categoría. Hubo un momento especialmente complicado cuando sufrí el accidente en Mónaco.

Aquello fue duro, ¿cómo lo recuerda?

Perdí el control del coche, perdí el conocimiento después y me desperté en el hospital y así pasé algunos días.

¿Tuvo miedo?

No, porque no me dio tiempo, pasó todo muy deprisa.

Hasta Hungría tuvo problemas por aquel accidente, ¿cómo logró recuperarse?

Lo pasé mal, pero con trabajo y un importante proceso de rehabilitación mejoré, aunque tardé en estar perfecto de mis problemas en la cabeza. Además, ahí tuve mala suerte porque no corrí en dos carreras y en otras cuatro no estuve al cien por cien, precisamente cuando el coche mejor estaba, cuando era más competitivo. Veremos en el segundo año si todo va mejor

Habla de ese 2012 en el que ya muchos piensan. ¿Qué espera de su segunda temporada en grandes premios?

Sobre todo consolidarme en la F-1, conseguir una posición y mejorar el rendimiento de este año en mi segunda temporada en Sauber.

Toda su vida ha querido estar aquí, ¿es como lo que esperaba?

Más o menos sí es lo que esperaba. En la Fórmula 1 hay muchos intereses y es difícil confiar en nadie, hay que saber elegir, pero eso es algo que me esperaba. Creo que nada me ha sorprendido especialmente, todo está bien.

Hay quien sostiene que está en F-1 por el dinero de Carlos Slim.

Bueno, es algo normal que se piense eso porque es verdad que Telmex siempre ha estado apoyándome, pero ahí están mis resultados y, además, se supone que si no fuera bueno no me apoyarían, a nadie le gusta tirar el dinero.

Este año ha habido varias carreras interesantes, quizá la mejor en Japón cuando se quedó a una milésima de la vuelta rápida de Button.

Estuvo bien, pero para mí el mejor momento fue en Australia, el día de mi debut, y además sorprendimos, llamamos la atención con una sola parada. Aquel momento fue muy especial.

Dice que llamó la atención y es cierto, porque ya se le relaciona con Ferrari. 

Ahora mismo tengo contrato con Sauber para el próximo año y tengo que hacerlo muy bien para poder llegar a un equipo como Ferrari, mi objetivo es llegar a ser campeón del mundo y poder estar en una escudería que me permita luchar por lograrlo, como Ferrari.

Viendo lo que está haciendo con Massa desde que llegó a Ferrari, ¿no le da miedo ser compañero de Alonso?

No, me motiva, no me da miedo, para mí Fernando es el mejor piloto que hay en la parrilla y pilotar a su lado en mi tercer año en la F-1 sería algo muy bueno para mí, podría aprender de él y mejorar mucho como piloto.

Dice que Alonso es el mejor, pero el campeón es Vettel, ¿por qué no gana si es el mejor?

Siempre hay más cosas en la F-1, el piloto marca la diferencia, pero no tanto como el coche y este año hay otros con mejores coches que él.

Por cierto, no haga más bromas como la del otro día a su gente de Sauber...

(Se ríe). Sí, bueno, son suizos y no lo entendieron del todo bien, les dije que tenía problemas en el motor cuando iba a acabar en Japón. Hace tiempo lo hice también en Alemania en GP2 cuando estaba en un equipo español y lo entendieron mejor, iba a ganar, era la última vuelta y les dije que me quedaba sin gasolina, se pusieron nerviosos... Pero aquí en Sauber se asustaron bastante más.