"Afirmo y reafirmo que ganaría con Red Bull"

Ya no es el novillero de aquel julio de 2009 cuando estaba tentando unas vaquillas y le llamaron para ponerse delante de los Victorinos en el coso húngaro. Ahora ya ha toreado en algunas plazas importantes, pero Jaime Alguersuari ahora sigue lidiando con morlacos mientras los primeros espadas eligen toros. Le queda mucho por hacer a este chaval de conversación fácil y apasionada que defiende su sitio y lo que le queda por conseguir como si fuera, que lo es, el proyecto de su vida. El piloto de Toro Rosso charló con AS cuando se cumplen dos años de su primer gran premio de F-1, el más joven de siempre sigue aquí. Que sea por mucho tiempo...

Alguien ha dicho que con un Red Bull ganaría carreras...

Sí, creo que es la primera cosa que pones buena que dice ese periodista de AS de mí. (Risas).

Ahora se lo pregunto, ¿ganaría carreras, estaría en los podios con un Red Bull?

Sí, sin duda. Lo afirmo y lo reafirmo. Seguro. Y lo digo aunque mucha gente ya se piense que llevo un Red Bull y hago el 17 porque me da la gana.

Es cierto que hay una parte de la afición que puede pensar así, como diría aquel, ¿por qué ocurre esto?

No lo sé, parece que nos miran igual que el fútbol, pero incluso si fuera así, ¿realmente alguien cree que Messi haría lo mismo en el Hércules que en el Barça? No lo entiendo.

Dos años ya, ¿satisfecho?

Sí, mucho, he hecho mi máximo y lo he dado todo en todo momento. Por eso he estado tranquilo siempre con todo lo que ha pasado y todo lo que se ha dicho, con todos los rumores que ha podido haber...

Hablando de rumores o noticias, ¿se ha visto fuera de la F-1 en algún momento de esta temporada?

No.

Así de rotundo...

Sí, pero ¿sabes una cosa? Si ahora no estuviera aquí estaría tan tranquilo en mi casa. Imagina que tuviera la oportunidad de poder repetirlo todo, incluso con la experiencia que ahora tengo, no lo haría mejor. Volvería a hacer lo mismo porque he hecho el máximo y no hay más. Claro yo estoy dentro y no todo el mundo ve lo que hay. Yo conduzco el simulador de Red Bull y sé lo que es, por eso contesto con esta vehemencia.

Todo el mundo habla maravillas de ese coche, incluso dicen que es el mejor de siempre...

Es difícil decir si es de los mejores o el mejor. Por ejemplo no sé lo que había en tiempos de 'Schumi' y Ferrari y es que antes del mejor al peor había 100 caballos de diferencia en el motor, igual en 2002 era distinto... es complicado decir.

Está hablando de la historia de este deporte.

Sí, el tiempo pasa rápido, lo que sí me he dado cuenta es que estos dos años se me han pasado volando, fíjate en 2002 yo tenía doce años...

¿Vive demasiado deprisa?

Sí, tengo esa sensación, me gustaría vivir más el momento. Parar un instante y saber dónde estás, lo que has conseguido y lo que has hecho, ver un poco mas allá, con perspectiva.

Después de todo lo vivido y sabiendo cómo es la Fórmula 1 ya desde dentro, ¿sigue pensando en ser campeón del mundo?

Sí, yo quiero ser campeón del mundo. Lo intentaré, si España me deja y quieren que algún día lo sea, lo intentaré...

¿Cómo no va a querer España...?

Bueno, pues eso, lo quiero intentar. Nunca se sabe, es uno de mis objetivos e ilusiones como que a mi madre le gustaría hacerse una casa en Sevilla. Es una de mis ilusiones y lucho por lograrlo.

Con ese sueño, ¿no teme la falta de motivación estando tan atrás en las calificaciones de los sábados?

A veces lo pienso, has de confiar mucho en ti mismo y no perder la motivación, pero sí, a veces dices: 'Otra vez...', pero es que estamos haciendo esta entrevista y sé perfectamente el sábado dónde estaré y no quiero pensar que estaré allí, pero a veces dices: 'Jolín qué rollo, estamos otra vez ahí, es un rollo...'.

¿Cuenta con la confianza de la gente de Red Bull?

Yo creo que sí, porque saben qué pasos son los que hay que dar. No me creo Dios para nada, pero sí que voy a ser campeón del mundo porque creo que puedo hacerlo y que voy a dar el máximo para poderlo conseguir.

Y en esa hoja de ruta mental que tiene, su espejo, ¿sigue siendo Vettel?

Es la carrera perfecta para seguir por parte de cualquier piloto joven. Ha hecho la F-3, las World Series, la F-1 con un Toro Rosso que no es el Toro Rosso de ahora y ha llegado con el mejor coche y en la mejor situación. Yo no me quejo, al revés, también soy un privilegiado porque si no hubiera tenido el apoyo de mi patrocinador, que es Red Bull, no hubiera estado nunca en esta escudería ni en la F-1.

Aquello sí que fue una sorpresa inesperada para todo el mundo...

¡Uff!, estaba en Alemania preparando una carrera del campeonato de 125cc de kárting. Me llamó Helmut Marko para decirme que me preparara que la semana siguiente corría, que lo dejara todo y que me preparara. Mucha gente ve que entrar en la F-1 es muy especial, pero en ese momento no sentí nada especial. Sentí un problema, un drama, me decía: '¿Cómo voy a hacerlo?'. La situación que tuve yo no la ha tenido nadie, nadie se ha puesto en mi piel y ha pensado cómo es esto.

Ha habido buenos momentos, claro.

Sí, me gustaría decirte mi victoria en Sepang 2009, por ejemplo, pero no, quizá no olvidaré nunca mis primeros puntos en Malaisia 2010.

¿Qué estaría haciendo ahora con su juventud si no viajará por todo el mundo con la F-1?

Música, me gusta mucho. La música electrónica me llena.

¿Es su mejor sensación?

Bueno, conducir un F-1, eso es la mejor sensación del mundo mundial...

Suerte...

Gracias.