Loeb y Ogier se vuelven a jugar la victoria del rally

Los pilotos de Citroën se vuelven a ver las caras en la etapa final de un rally. Al igual que ocurrió en México y Argentina, los dos sebastianes, Loeb y Ogier, se juegan el triunfo en el Acrópolis griego, sólo que esta vez es el heptacampeón el que sale en cabeza. Las dos anteriores esa posición la ocupaba su joven compañero, y acabó perdiendo el triunfo por sendos accidentes.

Sólo dos segundos les separan después de que Ogier levantara el pie en el tramo nocturno final de la jornada para dejar que abra pista su compatriota. Pero no van a estar solos en esa pelea, ya que Petter Solberg está a sólo 20 segundos y Mikko Hirvonen a 22. El orden de salida les favorece, y podríamos vivir el desenlace más emocionante del año en el tramo final televisado (Nitro a las 13:00), con cuatro pilotos peleando por el triunfo. Loeb y Ogier neutralizaron la gran ventaja que les sacaba Solberg, que al abrir pista no pudo defender su liderato algo que en esa etapa final de sólo 5 tramos y 65 kilómetros cronometrados se podría poner a su favor, ya que los dos Citroën oficiales serán los que le limpien la pista a él y a Hirvonen. Solberg se saltó un cruce en el que perdía 1º segundos e Hirvonen vivía un gran susto al escaparse de dos árboles de milagro.

Albert Llovera tuvo que retirarse al romper una bieleta en su Abarth Grande Punto, el mismo problema que sufrió en Cerdeña, pero espera reengancharse en la etapa final, ya que el coche no sufre otros daños. También se retiró el líder de Súper 2000, Ott Tanak, al volcar, y ahora está en cabeza Juho Hanninen.