Hamilton es el peor campeón desde 1998

El número uno siempre suele dar alas a quien lo lleva, pero la historia de la Fórmula 1 tiene una decena de pilotos que fracasaron en el año de su reválida. Entre ellos se encuentran ilustres como Alberto Ascari (que perdió un 97,55% de su título mundial de 1953, con 34,5 puntos, al pírrico 1,14 de un año después a consecuencia de hacer sólo cuatro carreras de nueve), el efímero Jody Scheckter (96,67% menos puntos entre 1979 y 1980) o el denostado Damon Hill (su paso de Williams a Arrows le costó dejarse 90 puntos de 1996 a 1997, un 92,78%).

En los últimos años el fuerte dominio de Schumacher después de su primer título con Ferrari en el Mundial de 2000, la doble corona de Alonso y su aguerrida defensa del uno en su año de McLaren y la aceptable defensa en términos absolutos de Raikkonen (de 110 a 75 puntos) durante 2008, habían dejado atrás los vaivenes de mediados de los noventa. Si hacemos caso a la historia, Lewis Hamilton es el peor campeón en la defensa del título desde que Jacques Villeneuve patinara por completo en 1998. La pérdida del motor Renault fue muy dura para Williams y el canadiense perdió entre su corona y el siguiente año 60 puntos, un 74,07%. Después iniciaría su aventura fallida en BAR y hundiría su carrera.

A mitad de temporada, el piloto británico suma el 73,47% menos de puntos que el año pasado. A estas alturas tenía 38 puntos por los nueve de ahora. El cambio de reglamento ha hundido a McLaren y lleva ya cuatro carreras seguidas sin puntuar. De seguir así, Lewis se convertiría en el séptimo número uno más débil de la historia, superado también por Andretti (de la 78 a la 79, un 78,13% menos), Lauda (de la 84 a la 85, un 80,56%) y Jack Brabham (de la 60 a la 61, un 90,7% de puntos menos). Lo bueno para el joven británico es que piensa seguir muchos años en McLaren y, tarde o temprano, regresará a la élite de la F-1.