El todoterreno Loeb se impone en Wembley

Solía decir el añorado Ayrton Senna que todos los años hay un campeón, pero no siempre hay un gran campeón. En la fiesta de final de temporada del mundo del motor, celebrada ayer en el estadio de Wembley, sí lo hubo. Sebastien Loeb, pentacampeón del mundo de rallys, sacó todo su talento y se llevó el triunfo en la Carrera de Campeones. El tercero en su palmarés individual (2003 y 2005), además de ganar con Jean Alesi la Copa de las Naciones en 2004.

"Ha sido un gran placer ganar", se limitó a comentar el piloto galo de Citroën. En la final venció a David Coulthard, que dejaba definitivamente la competición y quería despedirse por la puerta grande. No logró el triunfo, pero el británico se lo tomó con deportividad: "Estoy muy feliz de haber llegado a la final con la gran cantidad de buenos pilotos que había aquí. Y no es muy malo perder con alguien que es cinco veces campeón del mundo de rallys".

Antes de esa final, Andy Priaulx y Carl Edwards habían acabado con los dos máximos favoritos, Mattias Ekstrom y Michael Schumacher, en cuartos de final. Y en primera ronda, antes de derrotar al Kaiser, el norteamericano subcampeón de la Nascar acababa con el sueño de Jaime Alguersuari. El español, el más joven en la historia de la competición a sus 18 años, pagó los nervios y no pudo con el recientemente elegido mejor piloto del año del mundo del motor, basándose en las estadísticas de la temporada. Seguro que Alguersuari tendrá más oportunidades para demostrar sus habilidades frente a los campeones.

La otra competición que se celebró vio ganar al pasado y al futuro del automovilismo alemán. Schumacher y Sebastian Vettel reeditaron su título de la Copa de las Naciones. Lo lograron tras vencer en una apretada final a Escandinavia. Vettel perdió con Ekstrom y Schumi lo arregló derrotando al sueco y también a su compañero, Tom Kristensen, ocho veces ganador de las 24 Horas de Le Mans.

Alguersuari formó equipo con Troy Bayliss y ambos perdieron su manga frente a los británicos en cuartos de final. Jaime no pudo con David Coulthard y Jason Plato se deshizo sin problemas del tricampeón del mundo de Superbikes. Como anécdota, decir que el ganador individual, Loeb, que fue eliminado junto a su compatriota Yvan Muller por los subcampeones, perdió su manga frente a Ekstrom al volante de un Ford Focus. Parece que el cambio de marca no le sentó bien al piloto galo.

Las exhibiciones de Freestyle, el récord Guinness de donuts a cargo de Terry Grant y los dos paseos de Lewis Hamilton, uno al volante del MP4/23 y otro con un Mercedes SLR, completaron el programa que hizo disfrutar al numeroso público que asistió al estadio londinense. El esperado duelo entre el actual campeón de la Fórmula 1 con su monoplaza y el tricampeón olímpico en Pekín en ciclismo en pista, Chris Hoy, al manillar de su bicicleta, tuvo que ser suspendido por la falta de seguridad debido al estado de la pista.