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Fórmula 1 | Pretemporada 2008

Alonso bate al McLaren de Hamilton en Jerez

El asturiano superó por primera vez a su rival con el R28, en un día perjudicado por el fuerte viento: "Hemos sufrido con el aire, tendremos que centrarnos en mejorar el coche en las próximas pruebas"

Carlos Miquel
<b>CON LA RUEDA EN EL AIRE. </b>Fernando Alonso mostró su habitual agresividad en las chicanes de Jerez y eso le permitió rendir a buen nivel pese al viento reinante.
reuters

Los cazainsultos venidos de Inglaterra se volvieron ayer con las manos vacías de Jerez. Periodistas acreditados de la BBC, el canal ITV y del Daily Mail, que nunca suelen acudir a las pruebas privadas, estuvieron el martes y ayer miércoles en la pista para escudriñar el comportamiento del público en la grada. Nada que rascar. Ni un improperio racista que llevarse a la boca. La historia oficial habla de las medidas especiales y la presencia de la FIA con su camión y unos comisarios. La realidad es que no ha habido medidas especiales, nadie se las pidió al trazado andaluz, y que ese camión ha estado en todos los ensayos invernales.

El impecable comportamiento de los cerca de seis mil espectadores ha sido similar al del resto de circuitos, salvo la decena de descerebrados con megáfono en Barcelona. Los fans de Alonso pudieron ver ayer cómo el asturiano superaba por primera vez con el R28 al más poderoso McLaren de Lewis Hamilton, por una décima. Ahora bien, que los dos tengan cuidado con Williams, que ayer volvió a volar, con Rosberg segundo y Nakajima tercero. Es posible que llevaran menos combustible, pero estarán en la lucha.

Webber marcó un estratosférico tiempo con su Red Bull, 1:18.628, medio segundo mejor que el anterior récord de los nuevos coches. Huele a peso de calificación y a buenas condiciones en la pista. Pero el 1:19.8 de Coulthard (pegado a Hamilton) demuestra que la sorprendente tapa motor, aparte de parecer una vela y moverse en las curvas rápidas es eficaz para estabilizar las frenadas.

El fuerte viento enmascaró los resultados e impidió realizar tandas largas y constantes. No fue una jornada productiva y Lewis, de hecho, se pasó tres horas, de la una a las cuatro de la tarde sin salir. Tiempos al margen, lo más positivo para el bicampeón fue la fiabilidad de su coche, con 104 vueltas sin averías, algo de lo que no puede presumir Nelsinho, que sufrió una rotura de la bomba de gasolina.

Al término de la jornada, Alonso mostró su insatisfacción con el viento. De momento, los 25 kilos de cables que el coche ya no lleva encima (básicos en las primeras pruebas), ayudan a recolocar esos pesos y le dan una ganancia de décima y media por vuelta. Éstas son sus palabras: "Como el resto de equipos, hemos sufrido con el viento. Pero hemos probado piezas importantes, como los frenos, no afectadas por el aire. Tendremos que centrarnos en mejorar las prestaciones del coche en los próximos test de febrero".