El anime de ‘One Piece’ vuelve a superar al manga. Así ha sido la pelea entre Luffy Gear 5 y Rob Lucci, uno de los mejores capítulos de toda la serie

Water 7 (incluyendo Ennies Lobby) siempre será uno de nuestros arcos favoritos de la historia del manga. Por la pelea entre Usopp y Luffy, por el “¡Quiero vivir!” de Robin y por la lacrimógena despedida del Merry. Fue el arco en el que los Sombrero de Paja recibieron su primera paliza y la transformaron en power ups. Allí nacieron los Gear Second y Third de Luffy, el Monster Point de Chopper o el Clima Tact de Nami. También sirvió para descubrir a Franky, Sogeking y el pasado de la niña de Ohara. Y por supuesto, fue el arco del Cipher Pol y el desafío al Gobierno Mundial. Fue el arco de Rob Lucci, uno de los grandes villanos de One Piece.

Han pasado 17 años desde el episodio 309 del anime, aquel en el que Luffy logró vencer a Rob Lucci. Todavía más si hablamos del manga, donde ocurrió en el capítulo 427, estrenado un 16 de septiembre de 2006. El segundo se llamó “Ni que este fuese el infierno” y el primero “¡Los sentimientos mostrados a través de los puños! Luffy ejecuta el Gattling a la máxima potencia”.

Desde entonces ha habido mucho y muy bueno. Seiscientos capítulos más y villanos como Barbanegra, Akainu, Doflamingo, Katakuri, Big Mom y Kaido. Los mugiwara han hecho frente a amenazas mucho mayores que el Cipher Pol y su capitán ha pasado de ser un miembro más de la Peor Generación a ser uno de los cuatro Emperadores del Mar. Su recompensa ha subido de los 300 a los 3.000 millones. Tras semejante progreso y evolución, podéis imaginaros el bajonazo que le ha dado a muchos ver el regreso de Lucci a estas alturas.

Cuando el guepardo llegó a la Isla del Futuro, los fans de las escalas de poder y las comparaciones entre personajes se echaron a temblar. ¿Acaso iba Oda a intentar colarnos que Lucci había mejorado tanto como para plantar cara a los actuales Sombreo de Paja? No sería capaz, ¿no? Al fin y al cabo Luffy viene de derrotar a Kaido, el pirata más fuerte del mundo, el yonko que nunca había perdido una pelea uno contra uno. Y Lucci… pues es Lucci.

Por mucho que haya entrenado y ascendido dentro del Cipher Pol, sigue por debajo del rango de Almirante de la Marina, y quienes sí lo son, almirantes como Ryoukugyu, salieron por patas de Wano y no pudieron ni con Momo. A ojos de todos la organización ha quedado tocada y ha sido difícil generar respeto en torno a la misma. Si sus propios jefes han quedado tan a la zaga de los mugis, ¿con que argumentos iba Lucci a ser capaz de plantarles cara?

¿Hemos infravalorado a Lucci? ¿No hablábamos antes de él como uno de los mejores villanos de la serie? Puede que sí. Puede que hayamos perdido algo de perspectiva. ¿A cuántas personas hemos visto despertar su fruta del diablo como ha hecho él en este episodio? Y más si hablamos de una zoan. Ni el mismísimo Kaido pudo. ¿Y cómo de fuerte tienes que ser para que la Marina te encargue una misión de la dificultad de matar a Vegapunk, esa mezcla entre Pain y Voldemort? Por otro lado, ¿no venció Luffy al Rey de las Bestias después de decenas de rounds y tras haber contado con el apoyo de Zoro, Yamato y los Nueve Vainas Rojas? Puede que ni unos tanto, ni otros tan poco.

Durante todo Ennies Lobby no dejó de repetírsenos que Lucci era un prodigio, uno de los mejores combatientes a las órdenes del Gobierno Mundial. Si no ha parado de practicar y mejorar, ¿no ha podido equiparse a su rival? Y mirándolo desde otro punto de vista, que un personaje así vuelva a escena sólo le hace bien a la consistencia de un mundo como ‘One Piece’. Significa que los demás no están parados a la espera de ver qué hacen los Sombrero de Paja, sino que ellos también entrenan, viven sus propias aventuras y desarrollan sus respectivos poderes. Que Lucci vuelva con semejante nivel nos hace tenerle fe a otros regresos, como el de Crocodile con Cross Guild. Da una segunda vida a los favoritos de los fans, anima los debates en redes y permite a Oda no sacarse monstruos imbatibles de la manga.

En cualquier caso, nada de esto ha importado una vez hemos visto el nivel de animación que Toei tenía preparado para este capítulo 1.100. Lejos de levantar el pie del acelerador tras la Guerra de Onigashima, la compañía ha mantenido al equipo de Wano y ha realizado una serie de fichajes que están permitiendo a este arco lograr lo imposible y lucir aún mejor que el anterior. Por un lado estaría el director de este episodio, Nozomu Shishido, quien ya se pusiera al frente del 1.089 (el mejor valorado de toda la serie en IMDb). Por otro, Vincent Chansard, gran responsable de que ‘Jujutsu Kaisen’ sea el anime más famoso del mundo. Entre ambos acaban de brindar un espectáculo que tardará en olvidarse y que a buen seguro estará entre los nominados a mejor capítulo del año dentro de unos meses.

La cantidad de efectos desplegados, la paleta de colores, la calidad de las animaciones y los homenajes al estilo clásico de Tom y Jerry, la dirección, la nueva banda sonora... Un derroche que ha generado un innumerable número de memes e imágenes icónicas (Luffy dándose palmadas en el culo pasa a ser la respuesta oficial a cualquier hater de ‘One Piece’). No deberíamos olvidar este capítulo cuando hablemos de las series más bonitas y se nos vayan la cabeza a ‘Kimetsu no Yaiba’, ‘Shingeki no Kyojin’ y compañía. Pero lo mejor de todo es que Toei se ha sacado la mayoría de cosas de la manga y ha hecho auténtico cine con apenas un puñado de paneles. Una nueva demostración de que el anime de ‘One Piece’ supera al manga.

Viendo el nivel mostrado en esta “peleíta” y sabiendo todo lo que nos aguarda en los próximos capítulos (el villano que hace explotar cabezas o el verdadero aspecto de los Cinco Ancianos), como para no frotarse las manos. Larga vida a ‘One Piece’.