De Demon's Souls a Elden Ring: todas las notas de una serie que ya es leyenda

From Software se convirtió la madrugada del jueves al viernes en el primer estudio en conseguir dos galardones a Juego del Año en The Game Awards desde que funciona en este formato. Se alzó con el premio en 2019 con Sekiro: Shadows Die Twice y lo hizo esta semana con Elden Ring. En esta ocasión, además, Miyazaki consiguió el premio a mejor dirección, un reconocimiento que no pudo conseguir hace tres años porque cayó en manos de Kojima por su Death Stranding. Con la última entrega de la factoría de muertes y desdichas japonesa, la compañía consigue coronar más de una década de influencia y de una idea muy particular que durante mucho tiempo, fue a contracorriente.

Por eso, vamos a repasar las notas y valoraciones que todos los juegos Souls de From Software ha recibido en MeriStation y en Metacritic desde que se estrenase ese críptico Demon's Souls que tanto nos gustaba, aunque no sabíamos exactamente los motivos. Así le ha ido al género hasta llegar a la obra maestra llamada Elden Ring.

Demon's Souls (2009)

El inicio de todo, un Action RPG en el que cualquier enemigo te podía matar de un par de golpes y con ello perdías las almas que habías conseguido... y que necesitabas para subir de nivel. Si volvías a morir antes de llegar donde habías caído, perdías tu botín para siempre. Un lugar donde el orden de niveles no indicaba los más fáciles, donde había mensajes trampa de otros jugadores y donde la muerte era constante. Tosco, confuso, pero maravilloso. Aprendimos a morir.

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Dark Souls (2011)

El mito. El juego que marcó una época. Qué duda cabe que mantenía la esencia y muchas de las ideas del título anterior, pero también lo mejoró absolutamente todo, destacando por encima del resto una arquitectura y un diseño de niveles maravilloso, interconectado de forma inteligente y sorprendente. El lore explotó en este juego y rascar más allá de los objetos, personajes y lugares fue también una revelación para la comunidad.

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Dark Souls 2 (2014)

A veces denostado porque no estaba Miyazaki en la dirección, pero muy reivindicado por la comunidad más acérrima de la serie. Dark Souls 2 fue continuista, es verdad, pero amplificó el componente en línea, introdujo algunas ideas que no estaban nada mal planteadas, fue algo más accesible y entendible y nos brindó más jefazos y secretos que nos encantaba descubrir. Después salió Scholar of the Sin, una expansión que además cambió muchos elementos del juego base. Igualmente imprescindible.

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Bloodborne (2015)

Para muchos, el mejor que ha hecho nunca From Software, y motivos de defensa no le faltan. Estamos ante un juego que mantenía la base de lo que habíamos conocido, pero en medio de Yharnam, un emplazamiento gótico, terrorífico e impactante como ningún otro. Su ambientación, sus sistema de combate mucho más acotado pero particular, la cantidad de secretos y localizaciones escondidas y jefes finales inolvidables hicieron el resto. Nadie en el mundo entiende que no se haya remasterizado o al menos desbloqueado a 60 fps en PS5.

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Dark Souls 3 (2016)

La culminación de la trilogía Dark Souls llegó con una entrega que mejoraba de forma notable el control, la respuesta y el dinamismo de los combates, absorbiendo lo mejor de sus predecesores en un juego de escala mucho mayor, con algunos de los mejores jefes de toda la saga y con un diseño de niveles que seguramente no era tan impresionante como el primer Souls, pero que seguía contando con sorpresas, caminos inesperados y lugares interconectados de gran manera.

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Sekiro: Shadows Die Twice (2019)

Seguramente la propuesta más desafiante de todas las de estos últimos años y, para muchos, un título que no encaja del todo en la fórmula Souls aunque mantiene estructuras, elementos como la muerte y otros detalles que conectan con los juegos mencionados. Un título mucho más hack and slash, donde el combate es fluido, exigente y satisfactorio; donde el sigilo también es imprescindible. Y donde la habilidad del jugador marcará el éxito en su aventura. Sin duda, el mayor desafío made in From Software.

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Elden Ring (2022)

Y llegamos a la joya de la corona de este 2022 con Elden Ring, Obra Maestra de From Software, juego del año en The Game Awards y un videojuego que abrazó el concepto de mundo abierto y lo aplicó a su manera, con maestría. Un mundo gigantesco, con una cantidad ingente de contenido relevante escondido y esperando ser descubierto, con la sensación constante de sorpresa y con la libertad por bandera como nunca antes. Todo con una dirección artística de primera, una banda sonora marca de la casa y algunos de los personajes más bestiales que recordamos.

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