Cliff Bleszinski, más allá de Gears of War
Después de sucesivos fracasos comerciales tras su salida de Epic Games, el creador de Gears of War piensa en volver a la industria de los videojuegos.
Tras un tiempo alejado de los videojuegos para dedicarse a números musicales, el cocreador de una de franquicias emblema de Xbox apunta a volver a la industria, pese a sus últimos batacazos en el mercado. Hace ya 14 años que junto con Rod Fergusson -ahora en Blizzard y a cargo de Diablo- se pusiera manos a la obra para idear una de las sagas más reconocibles de los últimos 20 años, formando una trilogía fantástica que se prolongaría durante un lustro y quedara finalmente -y en la actualidad- en manos de The Coalition. Hablamos de, obviamente, Gears of War, el gran legado de un Cliff Bleszinski que desde que abandonara una Epic Games triunfante gracias a Fortnite no ha vuelto a saborear las mieles del éxito, más bien todo lo contrario.
Después de prácticamente dos décadas en Epic Games, Cliffy B. dejaría el estudio para fundar el suyo propio, Boss Key Productions, y ponerse a trabajar en el género en el que comenzaría su carrera, es decir, el first person shooter. Bleszinski formó parte del equipo que desarrolló numerosas entregas de uno de los shooter multijugador más emblemáticos de la primera década del siglo XXI como es Unreal Tournament, e intentó implementar todo lo aprendido en su primer juego lejos de la que había sido su casa durante tanto tiempo: Lawbreakers.
La vida después de Gears of War
Sin embargo, y a modo de curiosidad, no es exactamente su primer trabajo en un videojuego tras abandonar Epic Games, y es que aunque sea un hecho que pasara desapercibido, Cliff bue uno de los backers del exitoso Superhot en Kickstarter, aportando nada menos que 2.000 dólares y siendo el único que llegaría a tal cantidad. Dicha aportación le daría derecho a codiseñar uno de los niveles del juego, y es que desde el primer momento quedó prendado de la propuesta de este indie a cargo de un pequeño estudio polaco. “Pensé que era brillante y les escribí por Twitter para tener el juego antes de que el próximo Call of Duty les robara la idea”, dijo en su momento en Polygon. “Es la idea más innovadora en un shooter desde el Bullet Time”.
Pero tras esta participación poco más que anecdótica, volvamos a Lawbreakers. Con este juego, Cliff quería combinar algunos aspectos de los shooters multijugador más clásicos con otros más modernos, como el uso de la gravedad o la selección de personajes con diferentes habilidades. Alejado también de las multitudinarias partidas que proliferan en los multijugadores de hoy en día, Lawbreakers se limitaba a diez participantes en dos equipos de 5, en enfrentamientos en modos que, aunque contaban con nombres diferentes como Guerra por el territorio o Sobrecarga, no dejaban de ser principalmente los modos equivalentes a Dominio o Captura la Bandera, además del imprescindible Team Deathmatch, o Todos contra todos por equipos.
El lanzamiento de Lawbreakers se llevaría a cabo en agosto -mala época para un lanzamiento de por sí- de 2017, recibiendo unas críticas más que dignas por parte de la prensa especializada y contando con una nota media de 76 en Metacritic. En esta casa concretamente hablamos más de sus virtudes que de sus defectos, y es que las primeras eran numerosas: buen equilibrio entre clases, acertada combinación de elementos clásicos y modernos, gran rendimiento online. Entonces… ¿qué fue lo que falló?
Seguramente fuera cuestión simplemente de la tendencia del mercado, alejada ya de una fórmula en la que ya solo sobrevive Call of Duty y que entonces ya tendía claramente al subgénero que sigue triunfando mayoritariamente tres años después como es el battle royale. El año 2017 es el de la gran explosión de PUBG, juego que realmente popularizó esta fórmula, a lo que hay que sumar, unos meses antes del lanzamiento de Lawbreakers, el de nada menos que Fortnite, de la mano precisamente de Epic Games, y que no tardaría en convertirse en uno de los grandes fenómenos de la última década en la industria. Eso sí, aún le costaría llegar hasta ese status, ya que llegaría con el poco popular modo Salvar el Mundo, dando tumbos hasta lanzar su propio battle royale gratuito que posteriormente haría historia en numerosas ocasiones.
El fracaso de Lawbreakers dejaría patente que la autocrítica no era algo común en Cliff. Nuestro protagonista culparía de la paupérrima recepción del juego entre la comunidad a todos excepto a sí mismo y su equipo: a los propios jugadores, que no entendían el juego; a la prensa por no darle el reconocimiento que según él merecía, a Destiny 2 por quitarle jugadores o incluso al hecho de lanzar el juego en PS4 y no en Xbox, cuando había sido la plataforma de Microsoft donde había conseguido el nombre con el que aún contaba. El cambio al modelo free to play en junio de 2018 no serviría para insuflar algo de oxígeno a Lawbreakers, que cerraría sus servidores definitivamente en septiembre del mismo año.
Cliff ve la oportunidad, pero…
Probablemente viendo venir que no había manera de darle un impulso suficiente a Lawbreakers, Cliff y su equipo trabajaron simultáneamente en Radical Heights. En Boss Key Productions querían probar suerte en el género que había enterrado su primer juego y no desaprovechar la oportunidad, pero evidentemente tenían antes que pasar por encima de los mencionados PUBG y Fortnite, algo que como hemos ido viendo sucesivamente, es muy difícil, por no decir imposible. Otros lo han intentado, como Paladins o H1Z1, pero ambos permanecen fuertes entre los más jugados, sobre todo el título de Epic Games. Cliff se aplicaría aquello de “si no puedes con tu enemigo, únete a él”, pero no sería suficiente.
Radical Heights llegaría al mercado en primavera de 2018, y lo haría desde el principio siendo free to play -solo en PC-, algo que le sirvió para reunir en sus comienzos a miles de jugadores, curiosos por una nueva propuesta dentro del género de moda. Pero ya sabemos cómo funcionan las tendencias en compatibles, y aunque los jugadores prueben un nuevo título por mera curiosidad, si este no les convence no le van a dar más oportunidades para volver a lo que saben que es un valor seguro, y de este modo Radical Heights no tardaría ni dos semanas en perder más del 80% de su base de jugadores. Obviamente, sería cancelado poco después.
Pero estamos en pleno año 2020, y de entre todos los acontecimientos que están ocurriendo y están haciendo de él un año “diferente”, cualquier cosa es creíble. Ya avisó hace unos meses: Cliff tiene una idea para un nuevo juego y “no es un puto battle royale”, renegando de nuevo de un género que copa portadas y titulares desde hace ya mucho tiempo. ¿Con qué nos sorprenderá uno de los creadores más bocazas de los últimos 20 años?
- Acción
LawBreakers, desarrollado por Boss Key Productions para PC y PlayStation 4, es un título de acción FPS de corte multijugador ambientado en un mundo de ciencia ficción donde dos facciones de enfrentan entre sí, los LAW y los BREAKERS. Antes conocido como Project BlueStreak, es el nuevo proyecto del nuevo estudio de Cliff Bleszinski.