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Maximo vs Army of Zin

Maximo vs Army of Zin

  • PlataformaPS27.5
  • GéneroPlataformas
  • DesarrolladorCapcom
  • Lanzamiento12/01/2004
  • TextoEspañol
  • VocesInglés

Mi reino por unos calzoncillos!

Máximo, el caballero que tan bien defendió a su valedor -el gran Ghost'n Goblins- en su primera aparición en los 128 bits, regresa en su segunda aventura en la máquina negra de SONY. Vuelve el hombre de los calzoncillos. Vuelve Grim. Vuelve el mandoble de espada. Desenvaina!!!

Máximo, el caballero que tan bien defendió a su valedor -el gran Ghost'n Goblins- en su primera aparición en los 128 bits, regresa en su segunda aventura en la máquina negra de SONY. Vuelve el hombre de los calzoncillos. Vuelve Grim. Vuelve el mandoble de espada. Desenvaina!!!

Desde luego no es Sir Arthur, pero se le parecía. En "Máximo: Ghost to Glory" veíamos al que sería el descendiente de nuestro adorado caballero. Sus credenciales seguían intactas: un juego en esencia plataformero, pero con grandes dosis de acción y humor, mucho humor. Además, sus problemas con los muertos seguían siendo cosa de familia. Su aparición en PS2 supuso la vuelta de una saga -medio escondida, eso sí, en un nuevo personaje- a la actualidad que los más viejos recuerdan con cariño. Ahora, CAPCOM, visto el éxito comercial que tuvo su primera aventura, hace regresar a Máximo.

Pero ahora sus enemigos no son esqueletos, zombies, fantasmas y demás monstruos. No. Ahora el terror es mecánico. El ejército mecánico de Zin, adormecido en una caverna varios siglos tras una dura batalla contra los hombres, se empeñará en no dejar rastro de la raza humana en todo el planeta. Pero para ello tenemos a nuestro amigo, que además ha hecho buenas migas con otro personaje que sí vimos en "Ghost to Glory": La Muerte, Grim. Ella acompañará a Máximo en su aventura, y de vez en cuando será un aliado muy poderoso. Veamos qué nos presenta de nuevo el hombre de brillante armadura y colorados calzones...

g  r  á  f  i  c  o  s

El motor gráfico de "Máximo vs. The army of Zin" ha heredado la flexibilidad de su primera parte, y se ha potenciado en determinados aspectos, quedando reducido en otros. Para empezar, la intro es de gran calidad, y nos mostrará el comienzo de esta aventura con una CG bien construída. Los menús siguen el diseño de su primera parte, con pocas opciones visuales pero claras y de fácil navegación. Además, felicitarnos por que el juego sigue apareciendo con selector de Hz., algo que CAPCOM inteligentemente ha tomado como regla general, ya que los usuarios lo demandan, y en un juego de acción como este es muy necesario una suavidad y rapidez en la respuesta del pad acorde con los tiempos que corren. Gracias CAPCOM. Aprende, Square-Enix...

En cuanto al juego en sí, los entornos han sufrido variaciones a destacar. La distancia de renderizado se ha acortado, perdiendo de vista los magníficos entornos lejanos que Ghost to Glory nos presentaba. Además, las zonas de juego son más pequeñas, en ocasiones demasiado pequeñas para la lucha, aunque en general cumplen sobradamente. Esta minimización de los entornos, algo negativo en principio, nos favorece en unos escenarios más cargados de detalle y de efectos visuales. Las casas, castillos, granjas, etc,... tienen un acabado más trabajado, con más elementos interactivos (vegetación, árboles, construcciones,...) y con más enemigos en pantalla, así como PNJ's.

Además, los ambientes han sido más cuidados, con elementos móviles, hojas que se mecen por el viento, relámpagos, pequeños tornados,... logrando una ambientación acorde con el resto del conjunto visual. Hay algunas fases realmente bellas, tanto por la paleta de colores como por la recreación de los elementos que le dan ese aire característico, y que suelen dar nombre a cada fase. Las texturas de cada fase cumplen una temática buscada y conseguida. No son de gran resolución, pero el resultado visual es variado, trabajado y estilísticamente rico.

La suavidad de movimientos sigue siendo la tónica general del juego, aunque en ocasiones y cuando se encuentren muchos enemigos en pantalla y aparezcan los efectos de las peleas puede bajar la tasa de frames de forma visible. Muchos movimientos son extraídos de su primera parte, pero también nos presenta movimientos nuevos, en total unos 30 distintos. Además, contaremos con un gran martillo, totalmente demoledor, que hará nuestras delicias cuando nos encontremos con gran cantidad de enemigos rodeándonos, aunque será algo lento su uso. Los aldeanos, robots, etc, también tendrán animaciones acorde al nivel del resto, presentándonos un acabado muy suave y sin tirones en general.

También veremos gran cantidad de efectos gráficos. Deformación por calor, gestión de partículas en grandes cantidades para mostrarnos las chispas que salen de los mandobles de espadas contra los artilugios metálicos o el fuego, etc... Los efectos de luces y sombras también cumplen perfectamente, sobre todo la sombra de Máximo, bien diseñada y con un movimiento y acoplamiento a los entornos muy efectista.

Susumu Matsushita sigue siendo el genio creador de todos los personajes humanos y metálicos del juego. Su gran obra salta a primera vista con cada engendro, personaje o final boss que veremos durante el juego. Los diseños son realmente "marca de la casa", lo que le da al juego un toque especial y particular. Destacar algunos final bosses, auténticas obras maestras del diseño, y el paso por pantalla de Grim, espectacular.

Destacar que hay varios modelos distintos de enemigos comunes, PNJ's, elementos interactivos repartidos por los escenarios y variedad de escenarios muy distintos, cada uno con una temática particular dentro de un conjunto muy bien trabajado. Los modelados, tanto de Máximo como del resto de personajes, es muy bueno en general. La imaginería de Matsushita ha pasado a los polígonos de forma magnífica.

El motor de colisiones es bastante robusto y fiable. Será raro encontrarnos con momentos en que falle, y movernos, golpear y dar mandobles con la espada está perfectamente pulido. Además, Máximo cuenta con una animación para ascender a pisos superiores muy lograda, aunque algo irreal (la espada se clava igual en la madera que en la piedra, acero, etc...). Aún así, muy divertida.

En resumen, el apartado gráfico del juego nos presenta un motor gráfico pulido en muchos aspectos, y limitado en otros -esos enormes escenarios del primer juego no los veremos más-. Aún así, gran cantidad de efectos visuales y una suavidad de movimientos digna de elogio. Si además se presenta con su correspondiente selector de Hz, tenemos ante nosotros un apartado visual muy particular, espectacular y con el toque "Matsushita".

m  ú  s  i  c  a 

La banda sonora de esta segunda parte sí que tenemos que denunciar que ha bajado su calidad. Los temas orquestales se repiten más y son sosos, no nos dejan el "feeling" que nos dejaban los temas de la primera parte, muy del estilo de la saga G&G. Los temas son más fríos, sin el encanto de los anteriores. No son malos, la verdad, pero se denota una calidad inferior con respecto a Ghost to Glory, y a toda la saga en general. Simplemente pasable.

s  o  n  i  d  o   F  x

El sonido del juego cumplen sobradamente. En este sentido denunciar que esta segunda parte no viene doblada al castellano, curiosamente cuando posee más líneas de diálogo que el primer juego de PS2. Aquí hay más PNJ que hablan con Máximo. También Grim tiene diálogos con el personaje, etc... no se entiende que el primer juego haya llegado doblado muy dignamente al castellano y, sin embargo, este no lo haya hecho. Porqué, CAPCOM?

En cuanto a los FX, CAPCOM nos presenta una gran variedad de samplers para las explosiones, peleas, cruces de espadas, pisadas, etc... con el juego en movimiento, la inmersión aumenta gracias a la buena reproducción y tempo de los FX. Variados, bien realizados y con estilo. Qué más se quiere? 

j  u  g  a  b  i  l  i  d  a  d

Jugablemente, Maximo vs. the army of Zin ha variado con respecto a su primera versión en 128 bits. Lo que había sido un arcade con muchas dosis de plataformas -como la vieja saga, aunque pasando a las 3D- e innovando con movimientos nuevos y armas más potentes, ha ido variando hacia la acción sin concesiones, con puzzles incorporados en los entornos. Las zonas plataformeras han disminuído en número y en dificultad, dejando más protagonismo a las batallas contra gran número de enemigos. En principio puede ser que nos parezca más divertido, pero para los que conocemos la saga desde sus orígenes nos parece, en general, una pérdida mínima de identidad, un paso hacia "lo que se lleva", dejando de lado un estilo y una mecánica de juego que nos había encandilado.

Lo que sí se mantiene es la facilidad de control del personaje, además de unos combos de ataque muy bien ejecutados y de fácil realización. Las fases son más cortas, y el número de potenciadores, monedas, ítems, etc... ha aumentado en cada fase. Si además añadimos que el número de PNJ es bastante alto en cada nivel -obligado por el argumento, ya que Máximo se dedica a liberar a los habitantes del reino del poder malvado de Zin-, y cada vez que salvemos a uno recibiremos un premio por su parte -ya sea un cofre, monedas, etc, que hará aumentar nuestro dinero-.

Este dinero podremos invertirlo en muchas zonas de los niveles al salvar a algún PNJ que resulta ser un comerciante. Podremos comprarle ítems variados, tanto defensivos (armaduras) como ofensivos (nuevos movimientos, más poder para las armas, etc). Esto nos lleva a que el objetivo de Máximo es hacerse con el mayor número de monedas posibles en cada nivel, para así aumentar su poder y acabar más fácilmente con los enemigos. No encontraremos en este título los típicos esqueletos que salen de la tierra, ni fantasmas, ni zombies... algo que echaremos de menos, y que eran parte inequívoca de la saga. Si bien esto es a nivel visual, ya que enemigos los hay -a patadas- no tienen ese aire "G&G" de siempre. Eso no puede hacernos olvidar que el diseño de los nuevos enemigos mecánicos es sobresaliente, pero no lo que un fan de la saga espera...

Si en algún momento no llegamos a tiempo para salvar a algún personaje, no podremos recoger las monedas que nos daría o nos indicaría dónde hay un tesoro, con lo cual no completaremos esa zona al 100%... y habrá que volver a pasársela. Realmente hay una gran cantidad de secretos en cada zona, con lo que el juego se vuelve muy rejugable y la exploración cobra protagonismo en algunas fases con muchos recovecos y cofres ocultos que hay que encontrar. Además, como hechos comentado, los programadores han incluído más puzzles en los entornos, con lo que nos veremos obligados en ocasiones a pensar qué hay que hacer para superar cierta fase y poder avanzar a la siguiente. No son puzzles muy complicados, pero le dan vivacidad y variedad a cada nivel, minimizando la sensación de repetitividad.

El diseño de los mapeados ha sido hecho para que sea un juego muy lineal -ya el mismo mapa del juego lo es, en eso se parece a los primeros juegos de la saga-, y no podremos elegir la fase a la que ir -unicamente las fases que ya hayamos superado-, algo que su capítulo anterior sí se podía hacer, desde una zona central donde elegir la siguiente fase a la que ir. Pensamos que podría haberse hecho menos "directo", dar más libertad de decisión al jugador y potenciar el componente de exploración, ya que las zonas de plataformas han disminuído, y las que hay no son muy difíciles.

Hablando de la dificultad del juego, nos encontramos con que ha sido rebajada considerablemente si la comparamos a "Ghost to glory". Los enemigos -en general- son bastante más fáciles de aniquilar, y los combos de ataque de Máximo suelen ser bastante efectivos. Además, ayuda mucho la gran cantidad de ítems que encontramos y los que sueltan los enemigos -muchos recuperadores de vida y de armadura-. Nos encontramos con un juego muy jugable para el jugador medio, y un juego algo fácil para los expertos. Ghost to Glory nos pareció algo difícil, pero realmente ahora le han dado la vuelta y se ha hecho demasiado accesible para todo el mundo.

Las 21 fases de que se compone el juego dan para varias horas de juego (más o menos entre 6-8 horas), máxime si queremos completarlas al 100% lo que nos hará dar vueltas y vueltas para encontrar todos los ítems y tesoros ocultos -y para ello nos hará falta comprar algunos ítems sin los cuales no podremos descubrirlos todos-. No hay componente para multiplayer -lástima, por que podría ser muy adictivo- ni otro modo de juego distinto. Lo único disponible es una galería de bocetos que podremos ir descubriendo durante la aventura, y que en una opción aparte nos permitirá disfrutar de los geniales diseños de Matsushita.

Mención especial merecen dos puntos importantes: los final bosses, con unos patrones de ataque muy originales, y a los que nos costará encontrar su punto débil. Son espectaculares, con unos movimientos en ocasiones muy rápidos, y en ocasiones nos veremos forzados a pensar detenidamente la forma de aniquilarlos. En este caso, la gestión de la cámara se nos antoja algo complicada, sobre todo en las zonas cerradas y pequeñas.

El segundo punto importante es la presencia de Grim. La Muerte será nuestra compañera durante el juego, y podremos "invocarla" si juntamos una determinada cantidad de almas. Su aparición será irremediablemente la muerte de todos los enemigos que haya en pantalla, mientras dure el efecto de la invocación. Este factor añade un punto estratégico al juego, ya que el uso de Grim habrá que pensar muy mucho cuándo hacerlo, ya que lleva su tiempo recargar la barra de almas recogidas. Un buen detalle, tanto jugable como visual.

En resumen, la jugabilidad de este título se ha vinculado más hacia la acción que hacia la aventura con plataformas. Hay multitud de ítems por recoger y gente por salvar, pero su dificultad poco exigente puede hacernos el juego algo fácil de más. Destacar los final bosses, muy divertidos y las partes más complicadas de cada zona -como tiene que ser-.

c  o  n  c  l  u  s  i  ó  n

"Máximo vs. The Army of Zin" nos deja una de cal y otra de arena. Nos sigue presentando un estilo -a priori- muy similar al título anterior, con detalles propios de la saga. Sin embargo, la mecánica de juego ha variado. Se ha vuelto menos plataformero, con más acción y más fácil. Los jugones de siempre lo encontrarán más sencillo que su antecesor, algo que era propio de la saga. Aún así, como juego es muy bueno. No encontraréis tiempo para aburriros en ninguna de las fases. Los final bosses son bastante buenos y espectaculares, y las acciones a realizar en cada fase son numerosísimas.

Sin embargo, y mirándolo un poco desde la distancia, no parece completamente un Ghost 'n Goblins... su aire  ha cambiado -eso no quiere decir que sea malo, simplemente que quien espere encontrar un estilo muy similar a la saga no lo encontrará-, la mecánica de juego es más directa y a la vez es más variado y frenético. Se ha bajado bastante el nivel de dificultad, con lo que acabarlo se hará algo corto, ya que son 21 fases de gran arcade, pero se echa de menos un continuador de la saga como Dios manda. Si lo miramos de forma independiente a la saga, un gran juego.

l  o     m  e  j  o  r
- Gráficamente mejora en escenarios más detallados
- Jugabilidad arcade, directa y sin fisuras
- Susumu Matsushita sigue siendo un filón para crear los enemigos
- Control accesible desde el comienzo, y gran cantidad de cosas que hacer en cada fase

l  o     p  e  o  r
- Por qué le habrán bajado tanto la dificultad?
- La banda sonora es de lo menos bueno del programa
- Como continuación de la saga, no es su estilo
- A veces mover la cámara por los entornos pequeños es un engorro

Maximo vs. the army of Zin
7.5

Bueno

Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podrían haberlo llevado a cotas más altas. Cómpralo sin miedo.