El F50 Victoria sale a flote y firma un tercero y un cuarto puesto
El barco español logró cambiar la orza que rompió el pasado viernes y solventar los problemas hidráulicos e informáticos. Australia se adjudicó el Gran Premio de Dinamarca.
La suerte hay que buscarla y el F50 Victoria español la encontró en la segunda jornada del Gran Premio de Dinamarca gracias al trabajo incansable del equipo de tierra. Tras la rotura de la orza que sufrió el pasado viernes, la noche fue muy larga, se logró llegar a tiempo para disputar la segunda jornada de este sábado. Pese a volcar, la vela no sufrió ningún daño y los problemas hidráulicos e informáticos fueron también solventados. Ya en disposición de competir, el F50 Victoria apareció a las 12:00, a una hora de iniciarse las dos carreras del día, en las aguas de Aarhus y firmó una jornada para enmarcar. Firmó un tercero y un cuarto puesto que le permitieron acabar el Gran Premio de Dinamarca séptimos, dejando a Francia en el último lugar.
Pese a no tener opciones de alcanzar la Gran Final (tan sólo acceden los tres primeros clasificados del Gran Premio), el equipo español lució en el campo de regatas de Aarhus sin complejos. “No había presión porque el viernes no pudimos obtener ningún punto así que nos centramos en hacerlo lo mejor posible y mejorar las salidas, que era nuestro punto débil”, comentó Florian Trittel. Y dicho y hecho. El F50 Victoria tomó la primera posición en sus dos carreras disputadas este sábado tras dos salidas inmaculadas. Pero no lo pudo mantener hasta el final dado que no fue una jornada sencilla. Tampoco para los otros siete equipos en liza porque el viento impidió ver carreras trepidantes. No se superaron los 18 kilómetros hora de viento y los barcos apenas volaron. Es más, en la primera carrera, el F50 Victoria tuvo tramos en los que navegó a sólo 4 kilómetros por hora. Por ello, en las embarcaciones tan sólo había tres regatistas (lo normal son cinco) a bordo y en el caso del barco español los elegidos fueron los habituales Phil Robertson (caña), Florian Trittel (wing trimmer) y Diego Botín (flight controller).
El tercero puesto, en la primera carrera de esta sábado, y el cuarto, en la segunda, permitieron cerrar de manera más que digna el Gran Premio de Dinamarca para España y es que “para nosotros es como si hubiéramos ganado. El equipo sale reforzado de todo esto porque estamos muy unidos y cuando se alineen las cosas y desaparezcan todos los problemas estaremos arriba. Seguro que en breve se verán los resultados porque aquí hay un equipazo”, apostilló Trittel. En cuanto a la competición, Australia de Tom Slingsby se llevó el título en este Gran Premio de Dinamarca tras superar en la Gran Final a Japón y Gran Bretaña, que se vio claramente perjudicada por una penalización en mitad del recorrido por no dejar espacio en paso por la puerta a Japón. El circuito de SailGP se trasladará ahora a Saint-Tropez (Francia) donde se disputarán las carreras el 11 y 12 de septiembre. España llegará a este evento como sexto clasificado en la general, a nueve puntos de Australia, líder.