El oro que borró a Bubka

Armand 'Mondo' Duplantis consiguió el oro en salto con pértiga en el Europeo de Torun con un mejor salto de 6,05 y tres intentos sobre 6,19 que habría supuesto el mejor salto de la historia de la especialidad. El título continental de Duplantis es, en realidad, la noticia menos sorprendente del campeonato desde que se supo el viernes que Renault Lavillenie no le desafiaría. El fenómeno sueco, atleta de Red Bull y que llegaba con un mejor salto de 6,10 de hace poco más de una semana, cumplió con la lógica y saltó a la primera 5,60; 5,80; 5,85; y a la segunda 6,05) y añade un título más a un palmarés que necesitará muchos gigas de memoria para almacenar la carrera profesional.

El prodigioso saltador de 21 años se inició en esta difícil especialidad con 4 años, usando una pértiga muy pequeña hecha a medida por su padre, Greg (ahora su entrenador), que también fue pertiguista y llegó a franquear el listón en 5,80. Su madre, de soltera Helena Hedlund, fue heptatleta y jugadora de voleibol.

En Torun, lugar de gran recuerdo para él porque saltó 6,17 antes de subir el récord del mundo indoor (y total) en Glasgow con un centímetro más, su participación en la clasificación para la final del Europeo explica su enorme superioridad actual sin su amigo Lavillenie (que venía con un reciente salto de 6,06) en la pista. Mientras el resto calentaba, hacía carreras progresivas hacia el foso, miraba distancias del cajetín para clavar la pértiga... Duplantis estaba sentado en un banco. Ni un movimiento que pudiera hacer brotar una gota de sudor. Estiramiento muscular, un par de carreras al trote y un único salto intentado en 5,60, que superó por decenas de centímetros, para meterse en la final.

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El niño volador, ese que ha borrado a Sergei Bubka de todos los libros de números (aunque los éxitos y lo conseguido por el ucraniano, en su época momento atleta soviético, siempre perdurará), nació en Louisiana (EE UU) el 10 de noviembre de 1999 y tiene doble nacionalidad: sueca y estadounidense. Su historia en la pértiga en una sucesión de proezas que anunciaban en lo que se ha convertido. Con 9 años superó los 3 metros, con 13 los 4, con 15 los 5, con 18 los 6... y con esa misma edad saltó 6,05 mientras Bubka con esa edad hacía historia en 1983 al proclamarse campeón del mundo con su mejor marca, 5,70. En Roma, el pasado septiembre, Mondo franqueó el líston en 6,15 batiendo el récord del mundo al aire libre que aún conservaba Bubka dese 1994.

Duplantis es una estrella atípica. Es cercano, casi accesible y responde de forma sincera aunque su amplitud de sonrisa desvela que se guarda los datos técnicos fundamentales siempre que habla de sus cambios, mejoras o estrategia ante la competición. Además, su físico se sale del parámetro habitual del pertiguista ya que mide 1,68 y es el único de todos los que alguna vez han saltado más de seis metros en la historia que no llega al 1,75. De hecho, la media entre ellos es de 1,88. Pleitesía para el sueco que ha añadido en Torun otra medalla de oro en un Europeo indoor.