Jeff Knox, el misterioso socio 'comodín' de Augusta que ganó a Sergio García y Rory McIlroy
Es el miembro al que el club recurre si algún golfista se queda sólo en los emparejamientos para que juegue con él. Y ha conseguido cosas increíbles.
Nadie juega solo una ronda del Masters de Augusta. El encargado de evitarlo es Jeff Knox, el miembro 'comodín' del Augusta National y el protagonista de una de esas historias que hacen a este major especial. Lo normal es que Knox entre en juego el fin de semana del Masters. Y lo hace siempre que un número impar de jugadores pasan el corte, lo que da como resultado que alguno de ellos se quede sin compañero de partido. Ese pasa a ser este jugador aficionado de 57 años, que ha conseguido algunos hitos importantes a lo largo de los años.
Veamos. Knox tiene el récord del campo entre los miembros del club (¡61 golpes!). De entrada no cabe duda de que el hombre juega. Pero es que además, en sus incursiones a lo largo de los años se ha dado el gusto de acabar su vuelta con un resultado mejor que McIlroy, al que tuvo que acompañar cuando era número uno del mundo, y que Sergio García, ganador del torneo en 2017. Es decir, les ha ganado. Dicen que en el hoyo 6 ya no busca la bandera nunca porque ha golpeado tantas veces el palo que se ha cansado. De él han llegado a asegurar jugadores como Kevin Kisner y Justin Thomas que es el mejor del mundo leyendo los greenes de este complejo trazado. Todo esto justifica por qué en 2017 se le introdujo en el Salón de la Fama del golf de Georgia. El tipo es simplemente un genio.
Nadie que no compita a un cierto nivel ha disputado el Masters desde 2003 menos él. En los últimos tiempos se ha rumoreado sobre una posible sustitución pero este viernes, cuando el sudafricano Erik Van Rooyen se retiró por lesión y Sung Kang se quedó huérfano, ahí estuvo Knox para rellenar el hueco.
Que salga a jugar en las dos primeras jornadas es algo atípico, pero estamos en 2020. Esta vez no le tocará dar apoyo a nadie durante el fin de semana, dado que 60 hombres pasaron el corte y los números cuadran. Aún así seguirá esperando en la casa club, por si algún imprevisto obliga a su presencia en el campo y ofrece una oportunidad para agrandar su leyenda. Aún más.