Jon Rahm gana el BMW con un putt para la historia
El vizcaíno embocó el birdie del triunfo en el primer hoyo de desempate ante Dustin Johnson con un toque genial. El estadounidense retuvo el número uno.
Jon Rahm emergió en la carnicería del BMW Championship, el torneo regular más duro del PGA por resultados en los últimos 20 años, y se llevó un triunfo colosal, su quinto en el tour y el 12º de una carrera supersónica que puede acumular nuevos hitos próximamente. Porque el jueves el vizcaíno saldrá en la final de la FedExCup de Atlanta con un -8, en disposición de ganar por primera vez el mejor circuito del mundo.
La maniobra de Rahmbo durante el fin de semana en Olympia Fields (EE UU) fue propia de los nacidos para saborear la gloria. Tras dos días de penurias con un campo en condiciones extremas y un viento desquiciante, que terminó seis sobre par, se revolvió el sábado con un -4, la mejor vuelta del torneo entonces, y este domingo le añadió un -6 inmaculado con cuatro birdies en los últimos 9 hoyos y un putt de campeón en el par 5 del 15. Cerró con -6 en el día para -4 en total.
DJ, sólido toda la semana, con la confianza de su aplastante triunfo en el Northern Trust, arrancó fuerte con tres birdies en los cuatro primeros. Le acompañaba el chileno Niemann, joven irrupción (21 años) del desenlace, que llegó a liderar y cerró tercero en -2. Johnson pareció claudicar en el tramo final, pero el 18 le tenía reservada una golosina. Su putt para forzar el playoff, con Rahm calentando en el campo de prácticas por lo que pudiera pasar, entró desde más de 14 metros, una distancia con un ratio de conversión en torno al 3%.
Un desempate de infarto
El desempate se jugó sobre el 18. El de Columbia erró la salida, pero volvió a aparecer el duende: la bola quedó franca en la calle. Ambos llegaron a green de dos, con putts lejanos para birdie. Ahí se produjo el segundo momento mágico, un final para los almanaques: Rahm embocó el suyo, también por encima de los 40 pies, con una parábola celestial. El tiempo se detuvo durante cinco segundos y se reactivó con un rugido de rabia del León de Barrika.
"No puedo creerlo", acertó a resumir un momento que quedará en su hemeroteca. No recuperará el número uno del mundo, porque Johnson lo defendió con su segundo puesto, pero en el Tour Championship (donde no estarán Tiger Woods, 51º con -11, Adam Scott, Bubba Watson o Jason Day, entre otros) aspirará de nuevo al trono y a una doble victoria en el torneo y en el circuito, una triple corona hecha a medida para uno de los reyes de esto.