Irene González, de Hawai a Gwangju: "Allí no existe el estrés"

Irene González por Mati Ortiz ha sido el principal cambio que ha introducido Miki Oca en la lista de convocados para este Mundial de Gwangju, al margen del regreso tan deseado de Roser Tarragó después de más de dos años ausente. La historia de la nadadora catalana, que esta próxima temporada jugará en el CN Mataró con otras integrantes de la Selección como Anni Espar o Marta Bach, es inusual y exótica, después de pasar cuatro años estudiante una carrera universitaria en... Hawai.

"Quería estudiar una carrera fuera para aprender idiomas y vivir una experiencia. Me salió a través de una agencia la oportunidad de ir a Hawai y no me lo pensé", comentó Irene González. Era el curso 2015-16, previa a los Juegos de Río. La waterpolista fue una de las integrantes de la selección previa a aquel campeonato. Llegó a jugar el torneo de Portugalete y la Super Final de la Liga Mundial en Shanghai, pero finalmente fue un descarte de Oca. "Creí que ya no me llamarían cuando me quedé fuera de los Juegos de Río. Me quedé en Hawai los cuatro años para terminar la carrera de Fisioterapia. Pensé que cuando volviese podría tener alguna opción, y así ha sido y estoy muy contenta".

Irene ha estudiado en la ciudad Oahu, muy cerca de Pearl Harbor, donde los japoneses bombardearon a los estadounidenses en la Segunda Guerra Mundial, y a partir de ahí se involucraron de manera directa en el conflicto. Pero la vida en este conjunto de islas no tiene ahora nada que ver con eso, sino todo lo contrario. "Todo es diferente. Sigue siendo una carrera y hay una exigencia, pero digamos que allí todo el mundo va con la calma y no existe el estrés", relata la internacional.

Irene González es la mejor jugadora de su equipo, que compite en una de las ligas sectoriales norteamericanas, lo que también le ha valido para mejorar aspectos del juego y conocer los secretos de la mayor portencia en este deporte, al poder jugar con internacionales a menudo. "Volvería encantada a Hawai", comenta. Pero eso será en el futuro. Ahora le espera Cuba en este Mundial de Gwangju (1:30), el último escollo del grupo antes de los cuartos de final de su primera competición internacional.