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WATERPOLO

Perrone se desmarca de Ronaldinho: “Bolsonaro da bastante miedo”

El hispanobrasileño waterpolista del Atlètic-Barceloneta reconoce la dificultad que tiene su país para votar y se posiciona sobre el candidato de extremo derecha.

El jugador del Atletic Barceloneta, el hispanobrasileño Felipe Perrone, cargó con dureza contra el candidato electoral en Brasil Jair Bolsonaro.

“Las mujeres deben ganar menos cuando están embarazadas”. “Sería incapaz de amar a un hijo homosexual. Sería mejor que antes muera en un accidente”. Las frases son de Jair Bolsonaro, candidato y favorito después de las primeras encuestas a la presidencia de Brasil. Su figura, sus ideas y su partido de extrema derecha han causado pánico en la comunidad internacional, y ha recibido, por otra parte, el apoyo de deportistas como Rivaldo o Ronaldinho, quienes públicamente han respaldado al candidato que se ha ganado el apodo de Trump brasileño.

No es el caso de Felipe Perrone, natural de Río de Janeiro, país en el que reside su familia y con el que compitió en los Juegos de 2016. Esta tarde debuta su Atlètic-Barceloneta de waterpolo en la Euroliga ante el Eger (19:15). El waterpolista reconoce que “Bolsonaro da bastante miedo, la verdad”. Y describe lo difícil que lo tienen los electores en su país: “Es una situación complicada. Para un brasileño no es fácil votar. Tenemos un partido que ha salido en todos los escándalos de corrupción posibles, y por el otro lado ha emergido un candidato de extrema derecha contra las minorías y el respeto al ciudadano. Es complicado”.

Como ha comentado en anteriores entrevistas, Perrone siempre ha denunciado la corrupción que existe en Brasil, y pone como ejemplo los Juegos celebrados en su ciudad, en los que apenas se mejoraron las infraestructuras y la inversión llegó al día a día de sus vecinos. Un contexto que han aprovechado otros partidos para crecer.

La familia del Barceloneta, el secreto del éxito

A miles de kilómetros de su país, el internacional español afronta una nueva temporada en Europa con el reto de ganar la segunda Euroliga. El club marinero ha mantenido el bloque, y la plantilla se ha convertido en un gran grupo humano con la idea de mejorar la tercera posición obtenida en la pasada edición. “Lo pasamos muy bien como grupo. En muchos deportes la gente va y hace su trabajo, pero luego vuelve a sus casas. Nosotros estamos cada día juntos, vamos a comer, a cenar, de viaje… Nos crearon una amistad y una identidad con el club. Somos conscientes del esfuerzo”.

A priori, el grupo es el más pedregoso. Pero Perrone siempre ve el lado positivo de las cosas. “Vimos que nuestro grupo era más fuerte pero es una trampa pensar que eso es malo. Tenemos historia, iremos al Mundial y a los Juegos, así que este grupo nos va obligar a jugar todo el año a un nivel muy alto. Es positivo”.