Los daneses Soren Kjeldsen y Thorbjorn Olesen consiguieron la primera Copa del Mundo de golf, que se ha disputado en Kingston Heath (Melbourne, Australia), al aventajar en cuatro golpes a los equipos de Francia, China y Estados Unidos, mientras que el de España acabó octavo. La última jornada se disputó en la modalidad 'fourball', en la que cada jugador juega con su bola, puntuando en cada hoyo el mejor resultado de la pareja. Y los daneses se adaptaron como nadie, salvando cuantos envites les hicieron sus rivales más cercanos. Los daneses acabaron con 66 golpes, los chinos con 65, los franceses con 63 y los estadounidense con 66, con lo que la ventaja inicial de Kjeldsen y Olesen, de cuatro golpes, resultó definitiva e impidió que pasaran por momentos de cierto apuro clasificatorio. El equipo español mejoró sus prestaciones respecto al día anterior, que se jugó en la modalidad de 'foursome' (cada pareja juega una sola bola, alternando los dos jugadores las salidas en cada hoyo así como los golpes posteriores). Rafa Cabrera y Jon Rahm presentaron una tarjeta con 66 golpes y acabaron en la octava posición después de perder algún puesto en cada día de competición.