Torrijos domina en el triple y Lucas Búa vuela en 400 (46.65)

Pablo Torrijos era una de las atracciones de los Campeonatos de España. El castellonense llegaba a Madrid, recién firmado por el Villarreal, y con el recuerdo de haber batido el récord de España de triple (17,03) en el pasado Nacional. Esta vez no cayó, pero Torri dejó una buena sensación con tres saltos por encima de 16,50. El mejor fue el quinto 16,66, muy superior a los 16,37 de Bellido, plata.

“Irte más lejos ya depende de pequeños detalles técnicos que hay que pulir”, comentaba Torrijos, sobre la ejecución de sus intentos. El de Castellón es un tipo optimista de por sí y se ve reforzado por el nivel de entrenamientos que ha marcado esta temporada. “En pesas, en saltos… Estoy haciendo cosas que no he realizado nunca”, confirma Torri, con la vista ya puesta en Portland, donde si vuelve a volar por encima de 17 metros estará muy arriba.

Antes del salto de Torri, cuando no eran ni las 11:30 de la mañana en Madrid, el toledano Lucas Búa puso en pie el polideportivo Gallur. Ganó los 400 metros, una de las pruebas más espectaculares bajo techo por el factor calle libre. Pero eso no fue un problema para Búa, que ya llegó a los 200 destacado y no tuvo que enfrentarse al tamaño del carabanchelero Mark Ujakpor. El rival de Búa, de sólo 22 años, era el crono y lo paró en 46.65, mínima para los Mundiales de Portland y sexta marca española de todos los tiempos. Búa lo había buscado en semifinales (46,80), pero el premio llegó en la final.

Búa conocía el camino, porque minutos antes, Aauri Bokesa había hecho algo parecido. La de Fuenlabrada salió lanzada en las dos vueltas y dominó sin contestación: 53.39. No era mínima, pero tampoco importaba demasiado. Ya la tenía y, además, la madrileña ha decidido no viajar a Estados Unidos para centrarse en la preparación olímpica.