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21 años de cárcel para el asesino de Benito Múgica

El asesianto del ex seleccionador de Euskadi ocurrió el 16 de agosto de 2008, cuando el condenado se dirigió al domicilio de Múgica con varias bridas, trapos y un cuchillo

EFE | San Sebastián

El asesino del que fue seleccionador de Euskadi de balonmano Benito Múgica ha sido condenado hoy a 21 años y medio de prisión, después de que el pasado 17 de marzo un tribunal del jurado lo declarara culpable de su muerte con las agravantes de alevosía y ensañamiento.

La sentencia impone al procesado, un joven riojano que tenía 24 años cuando ocurrieron los hechos, veinte años de cárcel como responsable de un delito de asesinato y un año y medio por un delito de daños, ya que tras cometer el crimen dio fuego a una silla lo que provocó una gran humareda en el inmueble de Lasarte-Oria (Guipúzcoa) en el que tuvo lugar el asesinato.

Según el escrito judicial, los hechos se produjeron sobre las 22.00 horas del 16 de agosto de 2008, cuando el condenado se dirigió al domicilio de Benito Múgica, de 60 años, provisto de varias bridas, trapos y un cuchillo de catorce centímetros.

Una vez en la vivienda, el imputado trasladó a su víctima al dormitorio, le tendió en la cama, le maniató, le amordazó y le tapó los ojos, tras lo que le comunicó que iba a robarle.

En ese instante, la víctima trató de liberarse de las bridas, lo que "provocó" que el acusado aferrara el cuchillo y le asestara 23 puñaladas "con intención de quitarle la vida": cinco en la cara, dos en el cuello, tres en el pecho, una en el brazo izquierdo, once en el abdomen y una en el corazón que "penetró diez centímetros" y le alcanzó el ventrículo izquierdo "causándole la muerte".

El texto explica que, tras cometer estos hechos, el encausado "vertió media botella de alcohol en una butaca y le prendió fuego con una cerilla" lo que originó un pequeño incendio que, "si bien causó bastante humo, no se propagó al resto del mobiliario ni afectó a la estructura de la vivienda".

El asesinato de Benito Múgica causó gran conmoción en Guipúzcoa, ya que era una persona muy conocida en los ámbitos deportivos de la provincia, después de que en el año 2003 fuera distinguido con el Premio Euskadi del Deporte a la Promoción, Formación y Dedicación, que recibió de manos del entonces lehendakari Juan José Ibarretxe.

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