Las prisas de Villar por las elecciones

Mientras la Selección desembarcaba en Valencia, se conocía la decisión del juez de empapelar a media Federación por las presuntas irregularidades que son de dominio público. La Federación de Villar ya había recibido algo así como una amonestación pública al ver cómo el CSD le retenía provisionalmente la asignación de dinero público, a la espera de mayores averiguaciones. Ahora sufre una nueva ignominia, al ver cómo el juzgado de lo penal número 47 de Madrid llama a declarar como imputados a Padrón, Espino, Borrás y Castillón. Todos ellos conspicuos miembros de la cúpula federativa.

Estas actuaciones se derivan de las denuncias por abusos en los viajes. Pero además el juez requiere a Villar para que acredite los pagos correspondientes a sus cargos en FIFA y UEFA, y tiene aún pendiente entrar en otros asuntos incluidos en la querella: impago de las licencias a los clubes, retención indebida de los seguros y falsificación de facturas. Toda una causa general a una Federación que ha actuado de forma desordenada y caprichosa y que ha llevado las cosas a un límite a mi juicio intolerable. Ahora que todo está en manos del juez sólo nos queda esperar.

Es curioso: ayer mismo dábamos cuenta en AS de que Villar pretendía adelantar las elecciones, contra el criterio del CSD, que pretende que el proceso electoral de las federaciones olímpicas espere al final de los JJOO. Villar pretextaba plazos de renovación del seleccionador para salirse de ese criterio. Ahora, a la luz de esta decisión judicial (y las que se esperan), esas prisas se ven de otra forma. Bueno, pues hoy hay que decir que lo tomemos con calma. Que esperemos a saber si este presidente es un hombre honorable que merece presentarse de nuevo o un delincuente que encabeza una banda.