Entrevista Luis Moya
"Carlos y yo no terminamos bien"
El director deportivo de Subaru trabaja con uno de los rivales de Sainz, Solberg ("si no gana él, que lo haga Carlos") y recuerda: "Me quedo con los quince años juntos, no con el final"
¿Cómo produjo su retorno al campeonato?
No me esperaba la llamada de David Richards ni de nadie para volver a trabajar en el Mundial. Iba a trabajar en Miami, pero surgió esta sorpresa, y no lo dudé, porque las puertas del trabajo en América siguen abiertas.
¿Qué ha sentido al volver a su hábitat?
Pasar por el control horario sin el carnet de ruta es muy agradable. Me da un relax que no tuve nunca. Además, me ha hecho mucha ilusión saludar a tantos amigos. Yo era una persona de papel y lápiz, y el ordenador no lo tocaba. Pero a partir de Montecarlo, el primer rally que no corrí, no me ha quedado más remedio que aprender para poder seguir las competiciones. Tenía claro que como copiloto no iba a volver, pero he seguido los tiempos por internet, he mantenido contactos con Richard Burns, que viene mucho a Barcelona, con Dennis Giraudet.... pero no es lo mismo que estar aquí y poderverlos a todos.
¿Y el reencuentro con Carlos Sainz?
Como con los demás. No hubo ninguna sensación especial, sobre todo por la forma que terminé con él. La relación con Carlos no acabó bien, pero lo que cuenta son los quince años que hemos pasado juntos, que es con lo que prefiero quedarme, y no cómo hemos terminado.
¿Cómo le ha visto este año?
Carlos ha hecho un trabajo magnífico un año más.
Ahora se han convertido en rivales, porque usted está con Solberg. ¿Cómo lo afronta?
Trabajo para Subaru, y quiero que gane uno de los nuestros. Pero si no lo conseguimos yo prefiero que sea Carlos el que gane.
¿A qué se ha dedicado durante estos diez meses fuera de los rallys?
Cuando paré no quise abandonarme. El primer objetivo fue preparar un triatlón que se disputaba en mayo, con cuatro mil metros nadando, 120 kilómetros en bici y 30 corriendo. Mantuve una disciplina, y me vino bien.
Y luego llegaron los anuncios televisivos...
Eso fue curioso, porque me llamaron de Ambipur un día, y al siguiente lo hicieron los de Scalextric. Sobre todo este segundo me hizo mucha ilusión porque lo hacía con mis hijos. Eran dos días de trabajo y la publicidad se paga muy bien. Me parecía absurdo decir que no. Es comprensible que el de los ambientadores no haya gustado a algunos. No lo comparto, pero es así.