Delbosquismo sin Del Bosque

Dos jugadas perfectas, precisas, preciosas. Dos encuentros a trío entre galácticos. El primero, entre Ronaldo, Raúl y Beckham, con gol de éste. El segundo, entre Beckham, Zidane y Ronaldo, y gol de éste. Y antes y después, la expectativa de que pudieran producirse más encuentros de ese tipo. Se dieron pocos, pero habrá días en que se den muchos. Es lo bastante para sacar a la gente de casa, llenar el campo y ganar muchos partidos. Dibujo no hay, seguridad defensiva tampoco. Cada córner en contra sigue siendo un suplicio. Y Casillas salva una y otra vez los peligros. Colosal portero.

Es el delbosquismo sin Del Bosque, y a mí me parece muy bien. Confío en que Queiroz haga lo mismo que Del Bosque, un poquito mejor, o un poquito peor. En el fondo, nunca creí que el cambio fuera de verdad para mejorar nada, sino porque Del Bosque no habla idiomas, parece una cama deshecha y no daba el look que le gusta a Florentino. Ni de Valdano, que ahora se mata para traer un central y para obtener el permiso para ello le despeja por fin la plantilla de peso muerto a su presidente. Ahora sí que se ha puesto a dar bajas en serio. Pero su único objetivo, Ayala, se le ha puesto difícil.

Y del Madrid al Barça, que arrancó ganando en San Mamés donde, por cierto, compareció Gurpegui, tan campante. Dio positivo en el primer partido de la Liga pasada. Y ahí sigue. Me pregunto qué pasará con el próximo al que pillen con nandrolona, en el equipo que sea. ¿Será posible sancionar a alguien en el futuro? Por lo demás, el partido de San Mamés dejó la imagen de un Athletic con afán y sin suerte, y de un Barça zarandeado, pero sin descomponerse. Ronaldinho, intermitente, brillante en acciones aisladas, pero sin finalizar nada. Y tres puntos que confirman la buena estrella de Laporta.

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