Abroncan a Puyol por si ficha por el United

Que el City of Manchester aclamaría a Ronaldinho estaba escrito. Lo que no se esperaban quienes estaban ayer en el estadio era que Carles Puyol fuese recibido con una sonora bronca por parte de los supporters del otro equipo de la ciudad.

La razón de tan diferente trato hay que buscarlo en la tradicional inquina que mantienen las aficiones de los dos grandes clubs de Manchester, el United y el City. Como quiera que el brasileño renunció a fichar por los diablos rojos para irse con los azulgrana, la hinchada de los blues coreó su nombre y lo aplaudieron cuando fue citado por los altavoces. Todo lo contrario ocurrió con el de Puyol, que se convirtió en el foco de las iras de la grada por su presunto acercamiento al ex equipo de Beckham.

Ayer, la situación de Puyol y el United se mantuvo en un stand by, como dicen los ingleses. El jugador se mantiene mudo respecto a la supuesta oferta del conjunto inglés, a la espera de que sea el Barça quien mueva ficha. De momento, la reacción más oficial fue la del presidente Joan Laporta, que en un acto de la peña azulgrana de Navarcles, ni quitó ni puso rey: "Queremos que Puyol se quede. En un principio no es nuestra intención venderlo, pero estamos abiertos a escuchar ofertas, porque nadie es imprescindible".

Que el Manchester United va en serio lo demuestra el hecho de que la prensa inglesa ha vuelto a incidir en la oferta de 15 millones de libras (unos 25 millones de euros), una cifra que serviría para sanear la deteriorada tesorería del club azulgrana.

Habrá que esperar a que Laporta acuda a Derry (Irlanda del Norte), el partido de mañana que cierra la gira europea del Barça, para saber qué se cuece realmente en relación al presumible fichaje.

Mientras tanto las noticias sobre el futuro de Riquelme siguen siendo negativas para su regreso a Boca Juniors. Ambas entidades no se ponen de acuerdo por cuestiones económicas.