Simeone busca conector
El Cholo apuesta por hilvanar el juego a ras de césped retrasando a sus futbolistas de buen pie. Witsel como central, Lemar en el mediocentro o Griezmann por delante de Koke, sus experimentos.
El Atlético ha finalizado una pretemporada de lo más ilusionante. Pleno de triunfos, un balance con 13 goles a favor y uno en contra y grandes sensaciones físicas y colectivas. Y, además, ha servido para que Simeone pruebe y experimente con sus piezas en el tablero.
El técnico parece volver a decantarse por los tres centrales, con el recién llegado Nahuel Molina situándose en el carril derecho y Saúl ganándose su espacio en el izquierdo a la espera de la mejor versión de Carrasco y Lodi. También en sus partidos se le ha podido ver alternar el sistema con los cuatro defensas. Y, una novedad interesante se produce en la creación de juego. Hace dos temporadas (2020-21), el Atlético consiguió el título liguero con un fútbol dominante, de posesión, acercando el balón al área para potenciar a Luis Suárez y con Koke, Lemar, Llorente y compañía a gran nivel en la sala de máquinas.
Y parece que Simeone busca de nuevo jugadores que puedan conectar las líneas con el balón de protagonista. Las bajas en el centro de la zaga le han traído un iniciador del juego improvisado, pero que está brillando en esa labor. El recién llegado Axel Witsel se ha establecido como el cierre de la zaga, el antiguo líbero con libertad para ejercer de primer pasador que aclara y facilita la salida de los centrocampistas. Un seguro con balón (ha acabado los amistosos con 131 pases buenos de 134 intentados) y que, además de ser seguro en defensa, acelera el juego y es una bendición para Koke, Kondogbia y compañía.
Entre esos acompañantes para los pivotes se ha establecido también la figura de Thomas Lemar. El Cholo situó al francés en el doble pivote junto a Kondogbia en Oslo para buscar presionar la salida del United y crear desde atrás. Un plan que no salió según lo esperado y donde a Lemar se le notó incómodo en las labores posicionales defensivas y en tanto duelo con los centrocampistas ingleses. Sin embargo, el técnico volvió a retrasar al francés contra la Juventus y, pese a arriesgar en demasía en un par de ocasiones, se pudo ver a un Lemar muy cómodo junto a Koke y muy participativo con balón. Siempre ofreciéndose en la salida, abriendo el campo y buscando la combinación con Llorente más perfilado a la derecha.
Griezmann y Lemar de quarterback
Y en esa premisa de echar atrás a los jugadores con buen pie, también se ha podido ver a Griezmann ejerciendo prácticamente en la línea de tres centrocampistas. A la hora de partido en Oslo, Simeone dio entrada del tirón a Koke, De Paul, Griezmann, João Félix y Morata. Un arsenal ofensivo enorme donde el francés fue la conexión entre el medio y la delantera en un papel que repitió con mucho éxito en el Carranza, completando el duelo ante el Cádiz. Griezmann asistió a Morata para abrir el marcador y se reencontró con el gol que tanto necesitaba. Un ‘Grizi’ más de quarterback que de finalizador.
Una función en la que se han alternado los dos compatriotas, Lemar y Griezmann y que es una apuesta por ese fútbol combinativo y de toque desde la sala de máquinas. En Getafe se acabaron las pruebas, empieza el curso oficial y la apuesta del Cholo parece repetir patrones de aquel Atlético que acabó conquistando el título solo dos años atrás.