Raúl García: “Me habría gustado tener más conversaciones con el club”
El delantero rojiblanco, que renovó el 30 de junio, pedía tener un trato más fluido con la directiva. Reivindica el papel de los veteranos y censura a los que “mancharon” la imagen de Osasuna.
Raúl García no se muerde la lengua. El martes hizo 37 años y no está para andar con paños calientes. El proceso de renovación en Bilbao no le ha gustado y lo ha dejado claro en Lezama. Desde meses atrás dejó claro que quería conocer su futuro y la falta de unas conversaciones fluidas le ha descolocado, aunque entierra ese desagrado y mira al frente. “Me gusta ser claro, honesto, decir las cosas como son, es la base para dormir tranquilo. Me habría gustado tener más conversaciones, es la mejor forma de que luego no haya problemas. Necesitaba del otro lado un poco más de lo que se dio”, sentencia. Rulo firmó el día anterior a quedar libre, el 30 de junio, tras una tensa espera que se alargó más de lo previsto. Pero desvela que no es que se hubiera enturbiado la relación con la directiva ni que la propuesta no le convenciera. De hecho grabó en sus redes sociales un mensaje de confirmación de su continuidad mucho antes de hacerlo público. “Acabo la temporada y le digo a mi agente que mi intención es seguir, pero después de una temporada dura, quería desconectar un poco del fútbol, necesitaba un tiempo para estar con mi familia, desconectar, no iba a negociar otras cosas. En el momento que me comentasen, no había más que hablar, sabía que se iba a hacer”. El de Zizur añadió que su continuidad “no iba a ser un problema económico” porque tiene “prioridades mayores”.
La comunicación no es uno de los fuertes de la actual junta, al parecer, ya que es algo que también reprochó Iñigo Martínez antes de salir hacia el Barcelona. “Ya me conocéis, entiendo que soy una persona con la que se puede hablar de cualquier situación. Esto ya lo he hablado con ellos y no tengo nada que esconder, me hubiese gustado que hubiese una conversación más continua, para bien o para mal”, detalla. “En lo deportivo tuvimos palos duros como la semifinal de Copa o el final de Liga. Me implico al 200 por 100 y eso fue duro. Y con esa incertidumbre de saber si sí o si no necesitaba estar tranquilo con mi familia”, confesó sobre los días que se tomó para madurar la oferta de Uriarte y su junta.
Durante este tiempo la cabeza da muchas vueltas y eso ha podido influir en su rendimiento. “El único riesgo es que no quisieran que siguiera, cualquier oferta como mínimo era para dar las gracias. No me veía fuera soy una persona madura, son etapas y épocas, si se hubiera dicho una cosa u otra en diciembre, no habría cambiado nada”. El Mallorca del ‘Vasco’ Aguirre estaba interesado en reclutarle, pero no quiso descolgar el teléfono a nadie. Es un amigo, suelo hablar con él, si hubiese habido algún contacto... como pensaba renovar, se cerraban todas las puertas. Si han hablado mis agentes con ellos, no lo sé”.
El caso es que era en Bilbao o en ningún lado, lo más probable es que se hubiera terminado el fútbol para el veterano delantero si el Athletic no le llega a plantear la continuidad. “No tenía ninguna intención de escuchar nada fuera. Si el club quería que siguiese, no había más que hablar. Estaba más cerca de dejarlo que de ir a otro equipo, la intención de seguir era clara”, añadió tras incidir en que no está “dolido”.
En una comparecencia muy jugosa, como suelen ser las del 22 rojiblanco, se revolvió ante los que menosprecian a los veteranos y piden la llegada de los jóvenes. Su carrera está a punto de cerrarse, “es obvio, no voy a jugar hasta los 50, aunque quiera, cuando van pasando los años vas diciendo que va llegando el momento de la retirada”. Y protesta: “Estás en un club en el que se habla mucho de la gente joven, es una de las cosas que me molestan, que digan que los veteranos quitamos tiempo a los jóvenes, es un error, somos los primeros que queremos ayudarles. Trabajamos igual o más que todos los demás”. Sigue enarbolando la filosofía de que es “una persona muy exigente” y destaca que quiere mejorar lo que hizo el año pasado, “no estoy contento y quiero dar más argumentos para que el míster confíe más en mí”.
Con Valverde, que no le dio muchos minutos el año pasado, solo tiene palabras de elogio: “Lleva muchos años y sabe cómo gestionar un vestuario, tiene que buscar las mejores opciones, no tengo ninguna pega, todo lo contrario, cuando tiene que decir algo me lo dice y la relación es muy buena. Y con el vestuario ha recogido mucha adhesión en estas semanas de espera para firmar el nuevo contrato: “Soy una persona que intenta sacar lo positivo, el cariño de mis compañeros y la gente en la calle, no lo busco, pero cuando te llega, se agradece, por cómo trabajas y tu forma de ser. Las dos partes podíamos haber hecho las cosas mejor y no hay reproches, si quiero seguir aquí es porque lo tengo claro. No se puede hablar de futuro, hay disfrutar del día a día, por los años que llevo merezco disfrutar, siempre desde la exigencia”. El curso pasado acumuló 955 minutos, repartidos en 35 partidos, aunque solo 6 como titular.
Con este nuevo contrato se le pone a tiro el récord como jugador con más partidos en la historia en Primera. Está a 33 de los 622 de Zubizarreta y Joaquín. “Si en vez de 33 me quedasen 5, no hubiera buscado en otro sitio por el hecho de conseguirlo. Si lo consigo, mejor, es un reto que está ahí, pero no me mueven esas cosas, mi carrera no va a cambiar por conseguir 33 partidos más. Intento disfrutar día a día y ya veremos hasta dónde llegamos”, resume restando importancia al dato. La puesta en escena del año pasado con el presidente, el entrenador y el capitán marcando el objetivo de volver a Europa no acabó de ser compartido por Rulo, algo que, por cierto, ha regateado este año el propio Valverde. “No entendía salir a prensa a decir que el objetivo es Europa porque creo que el objetivo debe ser siempre el máximo. Decirlo o no no va a cambiar lo que me vaya a implicar. Tengo claro que el equipo tiene cuenta con opciones de entrar en Europa, pero hay que centrarse al cien por cien. No veo mucha diferencia entre decirlo o no”.
Su última referencia es a Osasuna. En su figura hay un intenso debate porque es el club en el que se formó y el rechazo de la UEFA a que participe en la Conference le debería alegrar, porque puede implicar la clasificación, de rebote, del Athletic. “A Osasuna le tengo mucho cariño, le quiero que le vayan las cosas bien, el foco hay que ponerlo en las personas que mancharon el club, la imagen que tengo no es la que se vio en su momento. A partir de ahí, no nos compete lo que ocurra, en el caso de que les sancionen, el siguiente equipo que está en la clasificación es el nuestro”. Los que dicen que la chispa de su descarte llega por la denuncia bilbaína le provocan rechazo: “Parece que hay que manchar al de enfrente, porque es lo normal “.