Raúl Arribas: “Mbappé ha pasado de ser la estrella a uno más”

En ocasiones la vida cambia por completo el escenario de algunas personas. Raúl Arribas (Barcelona, 1968) pasó de llevar en su mochila botas, espinilleras y guantes a estar rodeado de tornos dentales, jeringas de anestesia, pinzas y espejos de exploración. Como guardameta del Espanyol protagonizó un 4-1 en Copa al Real Madrid de Valdano en 1996. Poco después llegó a Leganés, donde fue el guardián de la portería pepinera durante siete años (1998-2005) y llegó a lucir el brazalete de capitán antes de cumplir los 30. Siempre tuvo amplitud de miras y durante el tramo final de su larga trayectoria entre palos fue construyendo un futuro alejado de los campos. Actualmente regenta, junto a su mujer, dos clínicas dentales a las que aficionados y jugadores del Leganés acuden con frecuencia.

—¿Los aficionados del Lega sufren más en su clínica o en Butarque?

—Aquí, sin duda, porque se gastan dinero y además no pasan un rato agradable. En Butarque se sufre, pero también se disfruta.

—¿Jugar ante el Madrid es lo más parecido a ir al dentista?

—Sí, puede tener un paralelismo, porque lo normal es que te ganen y salgas con mala cara. Tendrán que alinearse los astros para que el Leganés pueda darle una sorpresa al Madrid. Eso sí, si ganan un partido así los chicos se coronan.

—¿Hará falta anestesia para el Lega?

—Yo más bien aplicaría sedación a los jugadores del Madrid para que vengan más relajados (risas).

—¿Quién será el paciente y quién el dentista?

—Todo apunta a que el Madrid será el dentista y el Leganés, aunque juegue en casa, será el paciente.

—Salvo ante Osasuna, el Madrid llega tras una mala racha ¿es un problema de caries o necesita endodoncia?

—Creo que el problema del Madrid es de falta de predisposición. Son muy buenos, algunos de ellos de los mejores del mundo, y cuando se enfrentan a un rival inferior van al 70%. Es una cuestión de actitud y de relajación. Todos los equipos de Primera están bien preparados física y tácticamente. En igualdad de condiciones la calidad decide, pero si no pones la misma intensidad y concentración que tu oponente tendrás problemas. Ese es, en mi opinión, el problema del Madrid.

—El Madrid le faltan varias piezas importantes ¿se le puede hacer difícil la digestión?

—Le faltan algunos molares, pero tienen dientes de sobra para morder. El Madrid no puede excusarse nunca en las bajas porque tiene una plantilla en la que casi todos son o han sido internacionales. Podría hacer dos equipos competitivos.

—Mbappé tiene limados los colmillos. No es el de antes…

—Es un crack. Viene de un equipo en el que la estrella era él a otro en el que es uno más de los muy buenos, que son varios. Él tiene la aptitud, la capacidad física y la técnica para estar por encima de los demás y reaccionará seguro.

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—¿Cómo afecta la salud dental al rendimiento deportivo?

—Afecta tanto que muchos equipos están incluyendo dentro de su cuadro médico a un odontólogo o visitas periódicas. Si tienes una caries que no te han detectado es una infección que entra en la sangre. En ese caso puede provocar contracturas o roturas de fibras. El jugador puede que no sepa cuál es la razón y por eso es súper importante cuidar la boca y acudir a revisiones.

—¿Se infravalora ese aspecto de la preparación?

—En muchos casos sí. Hay que concienciar a todos los deportistas de la importancia que tiene. Cuando jugaba tuve un compañero que se lesionaba una vez cada dos meses por rotura de fibras. El problema no se solucionó hasta que le detectaron que provenía de una muela en mal estado. El médico del equipo no lo había localizado y en una visita al dentista se descubrió, se solucionó y desaparecieron esas lesiones recurrentes.

—¿La vuelta de Courtois es una mala noticia para el Lega?

—Por supuesto. Tal vez sea el mejor del mundo actualmente. La sombra de porteros como Courtois, Ter Stegen o Casillas en su época es demasiado alargada. Lunin es un gran guardameta, pero en las comparaciones sale perdiendo porque compite contra un monstruo.

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—Como portero ¿qué delantero le provocó más dolor de muelas?

—Le daré dos nombres. Ronaldo Nazario, que era una bestia, e Ismael Urzaiz, al que tuve de compañero en el Espanyol y luego como rival en el Athletic de Bilbao. Era buenísimo en el remate.

—¿A qué jugador le gustaría tener como paciente?

—Me hubiera gustado que viniera Ronaldo y conocerlo más. Me parecía un personaje fascinante, un tipo muy interesante.

—¿A qué futbolistas del Lega ha tratado?

—Es curioso, pero han venido muchos porteros. Serantes, Dani Giménez, Diego Conde y algún otro han pasado por el sillón del sufrimiento.

—¿Cómo recuerda el 4-1 al Madrid en Copa en el 96?

—Nos salió un partido redondo en Sarriá. En el Madrid estaban Hierro, Redondo, Raúl, Zamorano y otros muy buenos, pero Camacho, que era nuestro entrenador, supo motivarnos y transmitirnos su garra e hicimos un partido perfecto. Es un gran recuerdo.

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—¿Con qué jugador del Madrid no le gustaría tener un mano a mano?

—Con Vinicius y Mbappé.

—Dígame solo uno.

—Vinicius

—Cuando vuelva Unai Simón a la selección ¿a quién pondría?

—Raya lo está haciendo de lujo y Robert Sánchez es también de plenas garantías, pero Unai tiene una trayectoria que lo avala y yo le devolvería su sitio como titular.

—¿Le fastidia que a los porteros ni siquiera se les considere para el Balón de Oro?

—Claro. La solución sería un Balón de Oro para los porteros porque es el único especialista en el campo. Tendría que ser una categoría diferente.

—¿Usted es un ejemplo de la necesidad de preparar el futuro cuando un jugador está en activo?

—Los futbolistas, a diferencia del resto de la gente, ganan más dinero cuando son jóvenes y a veces no están preparados para manejar esa situación. Hay que saber rodearse bien y tener la mente lúcida para planificar un plan B cuando el fútbol se acabe.