Balaídos espera al Depor
El Celta B, con la incógnita Gabri Veiga, busca repetir la victoria del año pasado. El Depor necesita elevar el nivel de juego y vencer para despegar.
Durante toda le semana uno de los principales debates en Galicia ha sido si el Celta B–Deportivo es un derbi o no. Sea como fuere, lo cierto es que el duelo entre el filial celeste y los coruñeses tiene todos los ingredientes para no perdérselo. Con Primera detenida por la Selección, los focos bajan de escalón para centrarse en este partido. El escenario será Balaídos, que además estrenará césped híbrido para darle más lustre al envite. Las 600 entradas enviadas a A Coruña se quedaron cortísimas, el papel que había en Vigo ha volado y la afluencia de socios celestes marcará si se superan los 9.000 espectadores que acudieron la pasada campaña.
Precisamente ese último duelo está marcado en la retina de los dos equipos. Para el Celta y su afición fue una gozada ver como el filial derrotaba al Deportivo (2-1) y lo dejaba casi sin opciones de ascenso directo. Para los blanquiazules, un golpe deportivo difícil de digerir acompañado de indignación por la invasión del campo de los seguidores celtiñas ante la parsimonia de la policía. Este año el partido ha sido declarado de nuevo de ‘Alto Riesgo’ y los mensajes desde las dos orillas han sido elegantes y para pedir calma en un día que debe ser una fiesta pese a la enorme rivalidad. Así sea.
En lo deportivo, la gran incógnita en el Celta B se llama Gabri Veiga. La estrella de la cantera celeste ha entrenado toda la semana con Coudet y parece que apoyará desde la grada. Con todo, Giráldez no dio ayer la lista y la duda no se resolverá hasta que haya convocatoria. Borja Jiménez, por su parte, ha escondido cartas toda la semana, pero no se espera una gran revolución pese al empate ante el Pontevedra. Trilli apunta a la titularidad tras su larga lesión para aportar sangre joven y blanquiazul en defensa. En la media Olabe podría entrar el once, algo a lo que también optan Narro y Gorka Santamaría. Sean unos u otros el Depor necesita ganar por el rival que toca, pero también para empezar a despejar dudas sobre su juego.