Louzán tiene cien avales y el apoyo de 15 de las 19 territoriales

Rafael Louzán Abal (Ribadumia, Pontevedra, 21-11-1967), presidente de la Federación Territorial de Galicia, tiene el apoyo de al menos 15 de las 19 territoriales y ha reunido más de cien avales con los que concurrirá a las elecciones a la presidencia de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). Salvo Pablo Burillo (Castilla-La Mancha), Pablo Lozano (Andalucía) y Salvador Gomar (Valencia), la inmensa mayoría de los otros dieciséis barones de la RFEF apoyan de forma unánime a Louzán, sobre quien pesa una inhabilitación para ejercer cargo público por un delito de prevaricación.

Según fuentes jurídicas próximas al directivo gallego, esta sentencia no le impedirá concurrir a las elecciones de la RFEF por dos razones: el fallo no es firme (está pendiente un recurso ante el Tribunal Supremo) y la presidencia federativa no puede considerarse un cargo público al ser la RFEF “una entidad asociativa privada de utilidad pública, que se rige por la Ley 10/1990, de 15 de octubre, del Deporte, y por el Real Decreto 1835/1991, de 20 de diciembre, sobre Federaciones deportivas españolas (art. 1 de los Estatutos de la RFEF)”. En todo caso, según ha asegurado a este periódico Miguel Galán, presidente de la Escuela de Entrenadores CENAFE, en el mismo momento en que Louzán haga efectiva su candidatura, él presentará recurso de impugnación ante el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD).

En mayo de 2022, Louzán fue inhabilitado por la Audiencia Provincial para ocupar cargos públicos durante siete años por prevaricar cuando era presidente de la Diputación de Pontevedra. Louzán votó a favor de conceder a una empresa una subvención de 86.311 euros para unas obras de mejora del campo de fútbol de Moraña que estaban ya ejecutadas. El fallo incidió en que Louzán prevaricó al votar a favor del acuerdo de conceder la subvención “a sabiendas de que era ilegal y arbitrario porque respondía a un artificio para, burlando las barreras de la normativa, satisfacer las reclamaciones de la contratista, infringiendo el deber de transparencia y no protegiendo los derechos de la Administración”.

Este escenario aboca a la RFEF a no salir del pantano judicial en el que está inmersa desde que Rubiales dejó la presidencia, ya que los barones territoriales no van a admitir que prospere la candidatura conjunta formada por Salvador Gomar y Pablo Lozano, exsecretario general de las Juventudes Socialistas de Córdoba y ex teniente de alcalde de Pozoblanco por el PSOE. Frente a ella se postula Louzán, que fue presidente del PP en Pontevedra. Los unos tienen a su favor el apoyo del Gobierno y el otro, el de los barones territoriales, que son, en lo que a la RFEF se refiere, los que parten el bacalao de las elecciones al dominar los votos de la Asamblea.

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