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Laguardia: “Me voy con la cabeza muy alta porque lo di todo”

El central zaragozano del Glorioso se marcha del fútbol profesional en activo pero continuará vinculado a la entidad albiazul dentro del organigrama técnico.

Vitoria
Laguardia, con lágrimas en los ojos
David AguilarEFE

Víctor Laguardia se ha despedido del fútbol en activo rodeado por toda la plantilla y el cuerpo técnico de la entidad. También estaba su familia, sus amigos, gente de su agencia Bahía y algunos aficionados que le esperaban fuera del estadio. Asimismo, estaba Manu García, mito del club.

¿Cuándo decidió dejar la práctica en activo del fútbol?

Bueno, el descenso de hace dos años fue muy duro y conseguir volver a Primera en el mismo campo en el que caímos fue increíble. Al volver, estuve hablando con gente como Sedlar o Benavídez y ya me rondaba por la cabeza esa posibilidad.

¿Con qué sabor de boca cuelga las botas?

Me voy con la cabeza muy alta porque sé que di todo lo que tenía. Pienso que es el mejor momento para tomar esta decisión y la verdad es que no se trata tampoco de un adiós definitivo porque seguiré vinculado al club.

¿Las causas?

Un poco todo, la edad, las lesiones que he tenido durante mi vida y el hecho de que quería cumplir el año que me quedaba desde donde fuera. Siempre ayudando pero desde donde considerara el club. Veníamos hablando con la propiedad, el entrenador, los compañeros y la familia. Creo que es un momento bueno.

- ¿Cómo cree que se lo han tomado sus compañeros de la plantilla?

- Bueno, la mayoría no se lo creen del todo. Además, me seguirán viendo con ellos porque estaré cerca. Pero también lo han aceptado y lo respetan. Son decisiones personales, muy meditadas y se acaba aceptando lo que decide un compañero.

- Usted arrancó la temporada pasada un poco tarde. ¿Pudo influir eso en el rendimiento y, en definitiva, a su retirada de ahora?

-No lo creo. Dentro de poco voy a cumplir 34 años y también hay que dejar sitio a los jóvenes, que vienen con muchas ganas y que merecen su espacio. Es cierto que, con mi edad y las lesiones que he pasado en mi vida deportiva, comenzar tan tarde no fue bueno para mí. Pero estaba el tema ese del límite salarial. En ese sentido, también tengo que dar las gracias a la propiedad y al club que esperaran por mí y que encontraran una solución. A nivel personal yo también estoy muy orgulloso de cómo gestioné aquellos momentos, con mucha paciencia.

- Y luego no tuvo tanto protagonismo como en otras temporadas. ¿Fue duro?

- Creo que cumplí en todos los entrenamientos y siempre estuve a disposición del míster cuando me necesitó. Tanto dentro como fuera del campo. He hablado mucho con García Plaza durante estos meses, también con el Director Deportivo, Sergio Fernández. Ellos estaban al día de mis sensaciones de cara a la posible retirada.

- Díganos un momento con el que se queda en su vida deportiva.

Sin lugar a dudas el último ascenso en el campo del Levante. Hemos vivido otras situaciones buenas para recordar pero ahora, el que se me viene a la cabeza es el momento en el que Villalibre lanza el penalti y lo mete. Y luego, la celebración.

- Siempre ha tenido un vínculo especial con la grada, ¿verdad?

Es que son maravillosos, en esencia son estupendos. Sienten el escudo, ayudan al equipo en los momentos difíciles y coincidimos en muchos detalles de nuestra filosofía. Pero también me quiero acordar de la propiedad, de los directivos, de los trabajadores del club de los que se habla muy poco, de los compañeros, los médicos, del doctor Cugat que me volvió a dar la vida deportiva tras operarme de la rodilla y de todos y cada uno de los clubes por los que he pasado desde que era un niño.

¿Quién merece coger ahora el testigo del brazalete de capitán?

Bueno, hay muchos. Rubén Duarte, Antonio Sivera, Carlos Benavídez o incluso Javi López que es muy joven pero que lleva mucho tiempo aquí. Cualquiera de ellos puede hacerlo como yo también lo hice al recibirlo de Manu García, un jugador, una persona y un ejemplo a seguir.

- ¿Qué le enseñó Manu en ese tránsito?

- El sentimiento de pertenencia a este club. Eso es lo más importante. Es una responsabilidad representar a esta entidad y hay que darse cuenta de lo importante que es llevar el brazalete.

- ¿Qué cargo va a ocupar a partir de ahora en el club?

Está por determinar. Oficialmente es adjunto a la Secretaría Técnica y embajador del club para lo que necesite. En realidad, y a corto plazo, seré un enlace entre los jugadores y el club. Seguiré dándolo todo y ayudando desde donde se me pida.