La plaga que no cesa: Jokin Gabilondo se suma al festival de la lesión
Jokin Gabilondo se suma a la plaga de lesiones que asola al Málaga. Sufre fractura en el cuarto metacarpiano. Pellicer tiene en la enfermería a siete jugadores.


Lo que le está pasando al Málaga con las lesiones sería un tema para debatir en ‘La nave del misterio de Iker Jiménez’. No es lógico ni normal. Pero está pasando. Y lo que es peor, suma y sigue. Este lunes se ha sabido que Jokin Gabilondo se une a una enfermería que tiene excedente de cupo.
Según informó el club, Jokin sufre una fractura espidoidea diafisaria en el cuarto metacarpiano de su mano derecha. El jugador queda pendiente de evolución. La lesión se produjo en el transcurso de un lance del juego con Yeremay.

No se puede cuantificar el tiempo estimado de recuperación. Depende de casa caso, pero es posible que el mes no se lo quite nadie. Es arriesgado que juegue con cualquier tipo de protección especial. La cuestión es que el Málaga se queda laterales derechos con ficha profesional porque Carlos Puga sigue en el dique seco.
Una plaga sin precedentes
Al Málaga le está pasando de todo en esta complicada campaña. Lesiones, procesos gripales, Virus FIFA y sanciones por expulsión para que no falte de nada. Todo un festival de la desgracia que obliga a Sergio Pellicer a un constante proceso de reinicio.

El verano empezó complicado. Alfonso Herrero se perdió algunas semanas por culpa de una brecha en la cabeza y Jauregi no hizo pretemporada porque se lesionó. El portero ha estado lejos de su mejor nivel hasta el pasado domingo contra el Deportivo. Por su parte al delantero le está costando mucho ponerse al ritmo del resto de sus compañeros.
El estreno contra el Eibar trajo la primera desgracia que empezaría a marcar el mal camino. Un desgraciado choque de Luismi con Montero dejó KO al primero a los 20’. Fractura maxilofacial y varios meses de ausencia. Entonces aquí se detectó que el Málaga no disponía de un especialista de sus características y que Carlos Dotor no es un mediocentro sino un 8.

Pero lo peor estaba por llegar. En el transcurso de un entrenamiento Álex Pastor, que estaba jugando a un altísimo nivel, sufrió la terrible triada. El Málaga se quedó no solo sin mediocentro bregador. También perdió un central. Esto sucedió en el crepúsculo de la ventana de fichajes. Intentó traer a Vencedor, que se fue a Levante. Se fichó a Brasanac.
Y esto no hizo sino empezar. La nómina es tremenda. A los citados Puga, Gabilondo, Luismi y Pastor se unen Ramón y Moussa (lesionados de larga duración desde la temporada pasada) y Adrián Niño. Siete lesionados nada menos.

Al menos, Pellicer ha podido recuperar a Izan Merino, que, tras su lesión de tobillo, se fue con España Sub-21 al Mundial de Chile y a Joaquín Muñoz. El capítulo de sanciones afectó a Galilea y Montero mientras que Dorrio y Dani Sánchez cogieron lo que antes se llamaba ‘gripazo’.
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El técnico del Málaga tiene dos opciones para el lateral derecho. O mantiene al filial Rafita (lo hizo francamente bien ante el Depor) o recolocar de nuevo al multiusos Murillo, un jugador que ha elevado su nivel.
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