La escasa inversión en porteros del Sevilla
Con Nyland camino de ser el recambio de Bono a coste cero, en Nervión se perpetúa el camino de no hacer grandes desembolsos para reforzar la portería.
Orjan Nyland será el recambio de Bono. El portero noruego, actualmente sin equipo, llegará a Nervión a coste cero para perpetuar la tradición del club de su escasa inversión en la portería. Promesas, jugadores asentados, porteros con experiencia internacional... El Sevilla ha tenido en este siglo guardametas de todas las clases, con rendimientos mayúsculos pero también con sonados fracasos. Si algo les ha unido ha sido el escaso coste económico para la entidad.
Empezando por Andrés Palop, que llegó en 2005 libre tras acabar contrato con el Valencia y acabando por Dmitrovic, que hizo lo propio en 2021 en las mismas condiciones procedente del Eibar. Entre medio, una larga lista de porteros en el que por el que más se pagó fue precisamente por Bono. Llegó en 2019 a última hora tras la marcha inesperada de Sergio Rico al PSG cedido por el Girona. Un año después, se ejercia una opción de compra por 4 millones.
El siguiente más caro fue Diego López, un fiasco de 3,5 millones de euros. Hubo porteros con gran trayectoria internacional, como De Sanctis, que llegó libre, o Sirigu, cedido, que no cuajaron. Otros como Beto, que costó 2 millones, sí dejó un buen recuerdo, mientras que otros quedaron en anécdota por su precio, como Barbosa, por el que se pagaron 150.000 euros.
Además, el Sevilla ha tirado en esta época de la cantera, habiendo tenido su portería defendida por guardametas que salieron del filial como Javi Varas, David Soria o el mencionado Sergio Rico. La irrupción y revalorización de Bono nadie la esperaba. Ahora, se confiará en Dmitrovic como titular y y Nyland como temporero. Se repite la apuesta de antaño, que cuando fue ganadora lo fue por mucho, pero que también cuenta con fracasos notables.