El Racing empieza a oler la permanencia
Tras dos victorias seguidas en El Sardinero, el ambiente en los entrenamientos del Racing denota ya que la plantilla de José Alberto ve cerca el objetivo
El Racing sufrió en la noche del viernes para asegurar los tres puntos frente al Ibiza, pero le mereció la pena. El cómputo final del fin de semana le ha salido muy positivo. Con su victoria, que supuso el descenso matemático de los ibicencos, el empate entre el Málaga y el Huesca y las derrotas del Leganés y el Villarreal B, los de José Alberto vuelven a alcanzar la máxima distancia que ha tenido sobre los puestos de descenso, siete puntos, los que tuvo a la Ponferradina en la jornada 31, y tras un mes en la 18ª posición, la que marca la salvación, ahora ha logrado meter por medio a los pepineros y al filial del Villarreal, que llevan una racha muy mala de resultados. Con solo cuatro partidos por jugar, el racinguismo y sus jugadores empiezan a ver el objetivo al alcance de la mano. A diferencia de las semanas anteriores, en las que se mascaba la tensión, eso se ha podido ver hoy en el entrenamiento desarrollado en El Sardinero. Sonrisas y bromas 4 - Malas caras 0.
Los que no han podido participar de ese buen ambiente han sido los lesionados Germán y Rubén Alves. El veterano defensa de San Fernando padece una lesión en la fascia plantar de su pie derecho y virtualmente ha dicho adiós a la temporada. Menos grave parece la recaída del central hispanobrasileño, que se paró en cuanto notó un pinchazo en los isquios de su pierna izquierda y esa precaución, probablemente, ha evitado que el desgarro fuera mayor. Está descartado para el partido del sábado en Miranda de Ebro, pero no así para los tres últimos partidos del campeonato, aunque, eso sí, después del aviso del viernes pasado, sin arriesgar más de la cuenta por una posible recaída. La lesión de Rubén se la produjó precisamente al esprintar para intentar llegar al centro al área de Íñigo Vicente, que acabó controlando Roko Baturina y convirtiendo en gol. Menos mal que no llegó Rubén Alves porque él sí, a diferencia del croata, estaba en fuera de juego.
La gran novedad de la matinal de El Sardinero ha sido la de ver entrenando con normalidad, participando incluso en los partidillos, a Pablo Bobadilla. El central riojano, que es el único futbolista de la primera plantilla que no ha disputado un solo minuto en esta liga, fue operado del hombro hace cuatro meses y prácticamente ha perdido la temporada. Salvo que al Racing le sobre algún partido una vez asegurada matemáticamente la permanencia, tendrá difícil el de Nájera, que acaba contrato el 30 de junio, jugar en este curso.
Para el duelo con el Mirandés, José Alberto va a tener a su disposición a toda la plantilla excepto los dos centrales ya mencionados, Germán, que además de lesionado está sancionado por acumulación de tarjetas, y Rubén Alves. Arturo, con un edema óseo en un pie que le ha dado mucha lata en los últimos dos meses, se quedó fuera de la lista del pasado fin de semana, pero ya hoy entrenó con normalidad. A pesar de que el Racing inició el choque contra el Ibiza con ocho jugadores al borde de la suspensión por acumulación de amarillas, el único que sumó una (y porque la provocó tras notarse lesionado, o eso pareció) fue Germán. Dani Fernández, Íñigo, Aldasoro, Tienza, Sangalli, Íñigo Vicente y Matheus siguen sobre el alambre. Los dos últimos, por cierto, regresan a Anduva, un estadio en el que triunfaron en las filas del Mirandés.
777 y subiendo
A las seis y media de la mañana ya había racinguistas acampados frente a las taquillas de los Campos de Sport de El Sardinero, que abrían a las 10:00. Todo para asegurarse una de las 777 localidades que el Mirandés había enviado al Racing, las mismas que los cántabros mandaron a Miranda de Ebro en la primera vuelta, para el partido del próximo sábado (16:15) en Anduva. A mediodía, y porque el proceso de venta es lento, ya que cada entrada es nominativa y obliga a registar el nombre y el DNI del comprador, ya no quedaba ni una. Pero estos afortunados, y madrugadores, no serán los únicos racinguistas que animarán a su equipo ante los rojillos. El Mirandés vende entradas directamente en su página web, a 35 y 40 euros, eso sí, y a media tarde ya se habían vendido 170 de las 350 localidades de la Tribuna Norte 2, aledaña a la grada reservada a la afición visitante, por lo que el propio club local da por seguro que todas esas localidades han sido adquiridas también por seguidores verdiblancos. Con esas cuentas, a falta de cuatro días, ya serían casi un millar los racinguistas que tienen entrada para Anduva. Y subiendo.