El quirófano amenaza a Lucas Boyé
El delantero del Elche arrastra problemas en el aductor desde el curso pasado y no se descarta que tenga que operarse.
Lucas Boyé vuelve a encender las alarmas en el Elche. El delantero argentino está reviviendo la pesadilla con la que terminó el curso pasado. Unos problemas en los aductores le impidieron acabar con buenas sensaciones el pasado curso. Después de las vacaciones y el inicio de la pretemporada, el ariete franjiverde no ha mejorado y la sombra del quirófano sobrevuela por la mente de Boyé.
El argentino ha podido completar alguna sesión de pretemporada. Incluso, disputó unos minutos del amistoso ante el Villarreal B y marcó un gol de penalti. Pero las sensaciones no son buenas. Las molestias perduran y Boyé no termina de encontrarse cómodo. De hecho, el pasado sábado ya no pudo jugar ante el Leganés por culpa de ese contratiempo. Francisco le protegió y el técnico almeriense también está preocupado por la situación del punta.
Boyé ya se planteó pasar por el quirófano al final de la pasada temporada. El argentino apostó por un tratamiento conservador y pensó que el descanso le vendría bien para recuperarse del todo. Pero su plan y el del club no han salido del todo bien porque Boyé continúa con dolor en el aductor.
Los próximos días van a ser claves para aclarar la situación del delantero. Boyé no descarta pasar por el quirófano, aunque eso provocaría que estuviese varios meses de baja. Desde el club, consideran que si se opera ahora no estaría al 100% hasta después de Navidad. No obstante, el parón por el Mundial le podría venir bien a Boyé para no perderse muchas jornadas de Liga.
El punta está en una encrucijada porque es una pieza clave para el Elche. Su rendimiento es fundamental para lograr la salvación. Además, el delantero confiaba en realizar un buen inicio de temporada para tener opciones de estar en Qatar con Argentina, ya que ha estado citado en las últimas convocatorias. Ahora, el quirófano es una amenaza real, aunque Boyé podría esperar un poco más para no tomar una decisión tan drástica como la operación.