El método Bordalás es incuestionable
El Getafe suma cuatro puntos con un gol y de penalti. El premio por haber salvado al equipo ha sido dejarle una plantilla peor...
EI Getafe juega al fútbol que ordena Bordalás y en Getafe se baila la música que pone Bordalás, porque si hay algo claro por el Coliseum es que no se discute la voluntad del entrenador, un José Bordalás que tiene en el bolsillo derecho a la afición y en el izquierdo a la plantilla y al presidente. Es tal el predicamento que tiene Bordalás en Getafe que si un día decidiese presentar una candidatura para la alcaldía todos los políticos de la localidad pasarían a un segundo plano... Titular y favorito para coger el bastón de mando, él.
Que Bordalás es capaz de encontrar soluciones donde otros sólo ponen quejas es de sobra sabido por el Coliseum, pero esta vez la prueba que le han puesto delante no es del algodón sino del copón. El premio por haber salvado al equipo del descenso la temporada pasada ha sido entregarle una plantilla claramente peor.
Por la puerta de salida han desfilado ocho jugadores del plantel de la temporada anterior (Portu, Munir, Algobia, Seoane, Gonzalo Villar, Amavi, Conde y Casilla). De refresco han llegado Diego Rico, cedido de la Real Sociedad, Óscar Rodríguez y Carmona cedidos tras ser descartados por el Sevilla, Fuzato (portero suplente del Ibiza), más el Choco Lozano, que tras desvincularse del Cádiz firmó en el Coliseum pero que no le hace mucho tilín al técnico. Si a ello añadimos que los dos mejores de la plantilla están en la enfermería, Arambarri y Ünal (éste no volverá hasta enero), el panorama que le queda a Bordalás es de todo menos ilusionante.
En la primera jornada, el Getafe empató (0-0) con el Barça. De todas las críticas que desde Barcelona le llovieron al equipo azulón unas resultaron ciertas y otras no. El Getafe, pasó a liderar la clasificacón de faltas y tarjetas, cierto. Pero que el Getafe se dedicase a perder tiempo es mentira, fue el segundo partido de la jornada en el que más tiempo efectivo se jugó.
El dato estadístico que más justicia hace al Getafe es el de rey de la rentabilidad. En tres partidos ha marcado un único gol, y de penalti, pero con él suma cuatro puntos. No hay caso igual.
Bordalás ha quedado estereotipado como un entrenador defensivo, cuyos equipos dan muchas patadas y pierden mucho tiempo, un rara avis en el país del tiqui-taca que maneja como nadie el otro fútbol. Sin embargo, el técnico de Alicante siempre ha dicho que su referencia ha sido Cruyff, aquel fútbol del Barça del Dream Team.
Cierto es que todavía no hay señales que indiquen que los equipos de Bordalás intentan jugar ese fútbol de Cruyff o Guardiola, pero tan cierto es como que ya nos gustaría ver qué harían Johan y Pep si les diesen para dirigir los equipos que le dan a Bordalás.
L