El Eibar renuncia a su renta
En las tres últimas semanas, los de San José han sido incapaces de mantener su ventaja inicial. Zaragoza, Málaga y Tenerife les han empatado en la media hora final.
Los armeros han marcado la ‘X’ en la declaración de la renta. En tiempos de contribución, donde cada ciudadano cumple a rajatabla con la recaudación de la Agencia Tributaria, el Eibar ha mostrado su lado caritativo rubricando la casilla solidaria. Firma que ha ejecutado hasta en cinco ocasiones. Una por cada empate cosechado en las últimas jornadas. Y es que los pupilos de Beñat San José llevan más de un mes de competición sin degustar el sabor de la victoria. Así como el de la derrota, pues siguen siendo imbatibles con el donostiarra. No obstante, hacerlo a base de empates empaña un inicio histórico en el banquillo de Ipurua.
Oportunidades de victoria no le han faltado a los de San José. Sin ir más allá, en las últimas tres semanas, el cuadro azulgrana ha sido capaz de adelantarse siempre en el marcador. Bautista lo hizo por partida doble en La Romareda, el mismo repitió con la visita del Málaga a Ipurua y el pasado domingo Guruzeta le cogió el testigo para adelantar a los suyos en el Heliodoro. Aun así, el resultado final no se vio alterado: un insuficiente punto para cada equipo. Sobre todo a domicilio, al Eibar le está costando conservar su ventaja. Primero, porque le falta clarividencia y atrevimiento para defender a través de la posesión, y segundo, porque los problemas para proteger el área, que hace tiempo parecían olvidados, vuelven a hacer acto de presencia.
Gracias a las prestaciones de la pareja formada por Comas y Arbilla, el Eibar ha crecido a nivel defensivo. Es evidente que los armeros conceden menos ocasiones que en tiempos anteriores (solo han encajado tres desde que juegan juntos), pero esa tendencia no siempre se ve reflejada en el resultado. En la isla, el Tenerife hizo méritos suficientes para ver portería y era cuestión de tiempo ver la igualada en el electrónico. A través de la rápida activación tras pérdida y su acertada disposición para trasladar el balón a posiciones exteriores, el ‘Tete’ logró embotellar a los visitantes y avasallar así el área contraria a base de centros laterales.
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En una de estas acciones, incluso encontró el premio del gol, pero el liviano forcejeo de Maikel Mesa con Sergio Álvarez desestimó el tanto. Decisión que no impidió a los chicharreros continuar con su atropello, mientras los centrales azulgranas no daban abasto para apagar todos los fuegos. Finalmente, una jugada combinativa cerca del área visitante sería la encargada de firmar las tablas. Lo que era la crónica de una muerte anunciada por unos armeros que renunciaron al balón como principal medio. Sin él, cada minuto para mantener la renta parece interminable. Dignos de una declaración desfavorable.
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