Duk y Naim, la extraña pareja
Los dos marcaron y lideraron el triunfo ante el Andorra. Ninguno entraba en los planes prioritarios del Leganés, pero su verano e inicio de temporada ha hecho cambiar su destino.
Duk y Naim lideraron el triunfo del Leganés ante el Andorra (1-2). Una victoria balsámica de protagonistas imprevistos. Y no porque los dos, Duk y Naim, no estén siendo protagonistas de un buen inicio de temporada. Sucede que ninguno de los dos estaba, sobre el papel del comienzo de temporada, llamados a ser referentes de este equipo en el que, ahora, se han ganado el derecho a ser intocables. Además de polifuncionales. Tan pronto ejercen de extremos, como de delanteros o carrileros. Da igual. En todos lados están cumpliendo de sobra en cuanto a su rendimiento individual.
Suyos fueron los goles ante los del Principado en un doble ejercicio de bella factura. Duk y su ejecución de falta a lo folha seca está llamado a ser uno de los goles de la temporada. El zurdazo ajustado al palo largo de Naim también es uno de los mejores goles de la temporada para los pepineros. Doblete de artillería que ejerce como premio a su insistencia.
Naim, persistencia canterana
Especialmente larga en el tiempo ha sido la de Naim, eterno candidato a promesa pepinera que no terminaba de encontrar su hueco en los blanquiazules. Este chaval (23 años tiene todavía) explotó con vistas al primer equipo en la temporada 21-22. Su ‘boom’ coincidió con el de Cissé o Diego García, entre otros canteranos a los que Asier Garitano, entonces entrenador pepinero, dio oportunidades en el verano de pretemporada. Su participación fue de más a menos, con especial presencia como extremo izquierdo. Dos goles en 26 partidos oficiales fueron insuficiente carta de presentación para garantizarle la continuidad.
Comenzaron entonces tres cesiones consecutivas a Ponferradina (media temporada en 2023), Barça B (otra media temporada en 2024) y Racing de Ferrol (desde enero del actual año hasta final de curso) salpimentadas de dosis de mala fortuna, como haber vivido desde dentro dos descensos (el de Ponferradina y Racing de Ferrol) a Primera RFEF o una inoportuna lesión que en el tramo final del verano de 2024 impidió su salida en el mercado estival.
Un verano para cambiar
Naim se recuperó, pero no contaba en los planes de un Borja Jiménez que incluso colocó por delante de alguna convocatoria al canterano Iker Bachiller. Aquello no fue plato de buen gusto para Naim y el resto de vestuario que lo tenía en alta estima. Pese a ello, el chaval (tiene contrato hasta 2027 y una cláusula de 25 millones de euros) no cejó en su empeño y con el descenso a Segunda ha peleado una oportunidad que se ha ganado por rendimiento.
Inicialmente Paco López dio prioridad para su puesto de extremo derecho a Roberto López, pero Naim, con buenos números en verano y, sobre todo, virtudes que se adaptaban a lo que pedía el entrenador (alta presión, buena ejecución del balón parado, desborde…) se ganó una titularidad que no ha soltado desde entonces aun incluso tras el fichaje de Pauwels.
Ya es el tercer jugador de campo con más minutos con 657 disputados en toda la temporada en ocho apariciones, todas de titular. Además, no hay pepinero que haya creado más ocasiones que él con su participación (12, cuatro más que el siguiente, Cissé con 8) y es el segundo jugador de Segunda que más centros buenos ha metido en todo el campeonato: 15.
Un surtidor de balones al área que ya ha probado como extremo derecho, izquierdo y carrilero zurdo. Ahí está destacando ahora en una reconversión que en Andorra le permitió atacar suelto -de ahí su golazo, segundo del curso que marca- pero también defender cuando tocaba.
Duk, rebelión desde el ostracismo
Algo parecido trató de ejercer Duk durante las tres jornadas que le tocó jugar de carrilero diestro, aunque su vuelta al costado contrario en el Principado le permitió recuperar la chispa y, sobre todo, una mayor presencia en área rival. Con la mente más focalizada en ataque, Duk rinde mejor.
No tuvo que pisar área alguna para lanzar el zapatazo de falta que supuso el 0-1, también su segundo gol en el esta temporada en la que está siendo referente ofensivo de los madrileños por su desborde, llegada y potencia. Una combinación de factores que pocos esperaban que luciera después de que su fichaje en el pasado mercado invernal pasara desapercibido.
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Tampoco Duk entró en los planes de Borja Jiménez (“He hablado más con Paco López en cuatro semanas que con Borja en cuatro meses”, llegó a confesar en verano) y aunque cada vez que jugaba, demostraba detalles, acabó renegado al ostracismo. Pero él, como Naim, se ha revelado contra ese rol secundario o la competencia de jugadores de peso como Juan Cruz o Pauwels (segundo fichaje más caro en Segunda en la historia del Leganés) para ser ahora otro intocable al que solo puede retirar del césped o la necesidad de descanso o las molestias físicas.
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