Cómo se resuelve la final de la Champions en caso de empate: ¿prórroga, gol de oro o penaltis?

Este 1 de junio, llega uno de los momentos más esperados por parte de todos los aficionados al fútbol en Europa. Llega la final de la Liga de Campeones. Real Madrid y Borussia Dortmund se miden en uno de los encuentros con más expectación de los últimos tiempos. El cuadro de Ancelotti quiere agrandar su leyenda, mientras que el conjunto alemán, una de las grandes sorpresas de la temporada, busca volver a levantar la antigua Copa de Europa.

Ambos conjuntos tienen claro que el encuentro puede suponer un antes y un después en sus respectivas trayectorias en la Champions. El momento ha llegado y nadie puede echarse atrás. Wemblay será la sede de una contienda que promete ser una de las más emocionantes de una final de la Liga de Campeones. Por ello, hay que tener en cuenta varios y numerosos detalles. Uno de los más importantes está directamente relacionado con la forma de dilucidar el partido si este termina en empate tras los 90 minutos reglamentarios.

¿Cómo funcionaría la final de la Champions si el partido termina en empate?

Este es uno de los detalles más relevantes que se deben tener en cuenta acerca de la final de la antigua Copa de Europa. Como suele ser habitual en los últimos años, si Real Madrid y Borussia Dortmund terminan los 90 minutos reglamentarios con empate, se recurrirá a un tiempo extra de 30 minutos. Este período que se añade al regula tiene dos tiempos de 15 minutos cada uno y, al igual que en el tiempo reglamentario, hay un pequeño descanso para que las dos escuadras puedan coger fuerzas.

Si el encuentro sigue igualado y la prórroga no determina al nuevo campeón de la Champions, la tanda de penaltis decidirá el destino final. El cuadro más acertado en los lanzamientos desde los 11 metros será el que consiga hacerse con uno de los premios más cotizados en Europa: el trofeo de campeón de la Liga de Campeones.

Sin goles de oro y plata desde 2004

El “gol de oro” daba la victoria al primer equipo que marcase en la prórroga. La fórmula nació por iniciativa de la FIFA para favorecer el juego de ataque. Este modelo estuvo vigente en la Eurocopa de Inglaterra 1996 y Bélgica-Holanda 2000. Los campeones se decidieron por esta fórmula calificada como una especie de “muerte súbita futbolística”. En la primera Eurocopa con esta fórmula, Alemania derrotó en la final a la República Checa.

La primera vez que se utilizó en un campeonato mundial fue en los octavos de final de Francia 1998. La selección local derrotó a Paraguay. En 2002 también estuvo vigente. Tras este último mundial la FIFA se inventó el gol de plata que llegó hasta la Eurocopa de Portugal en 2004. Solo se jugaría la segunda parte de la prórroga si en la primera se había mantenido el empate.

El griego Dellas marcó en el último minuto de la primera parte de la prórroga de las semifinales contra la República Checa. Fue el último gol de plata de la historia. Si hay empate en las eliminatorias actuales van a la prórroga, que consta de dos partes de 15 minutos cada una. En caso de empate, el partido se decide en los penaltis.