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Camus se va cedido al Córdoba

El extremo santanderino no cuenta para José Alberto, que no le convocó ante el Tenerife, y ha pedido salir hasta final de temporada

Marco Camus, del Racing, se lamenta de una ocasión fallada ante el Mirandés.
Nacho Cubero

Marco Camus, después de decir muchas veces que no a muchos clubes desde que tenía 14 años, ha pedido salir del Racing y el club ha aceptado cederle hasta el 30 de junio al Córdoba, tercero ahora mismo en el Grupo I de Primera Federación, en donde pelea por el ascenso. La decisión de José Alberto de no meterle en la lista de 23 convocados ante el Tenerife el pasado viernes ha sido la gota que ha colmado la paciencia del extremo santanderino.

Marco, que renovó el pasado mes de mayo hasta el 30 de junio de 2025, después de pasar por todo escalafón de las Instalaciones de La Albericia, ha jugado 71 partidos de liga con el primer equipo, 22 como titular, y ha marcado dos goles. Después de jugar 30 partidos la temporada del ascenso, esperaba tener un mayor protagonismo en esta, pero su presencia fue de más a menos con Romo y quedó reducida a la marginalidad desde la llegada de José Alberto, que le alineó los últimos 15′ en Cartagena, el estreno del ovetense, cuando saltó al campo ya con 0-3 en el marcador. Desde entonces, nada. Fue el único de los no titulares en Cartagena que no tuvo oportunidad de jugar la Copa del Rey en Linares, fue adelantado por Yeray, primero, y por el recién llegado Marco Sangalli, después.

Marco Camus, del Racing, en el banquillo junto a los técnicos Pablo Álvarez y José Alberto.
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Imagen frente al Sporting, en el partido contra el Tenerife Camus no estuvo ni en el banquillo.Nacho Cubero

El nuevo entrenador racinguista ha declarado que para él Camus es un especialista, con unas cualidades muy concretas, un extremo izquierda puro, con desborde por potencia por fuera, y lo cierto es que ese no es el tipo de extremo que a él le gusta. Prefiere futbolistas que partan de fuera hacia adentro para dejar hueco al desdoblamiento de los laterales. Cada maestrillo tiene su librillo, ya se sabe. Y en el José Alberto, ya se ve, no había páginas para Camus.