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ELCHE 0 - REAL SOCIEDAD 1

Aprobados y suspensos en el Elche: Álex Collado vuelve a brillar en solitario

Edgar Badia paró un penalti y tuvo varias intervenciones de mérito. Pocas acciones de peligro en el área rival.

ELCHE, 27/08/2022.- El portero del Elche Edgar Badía (i) celebra para el penalti del centrocampista de la Real Sociedad Mikel Merino, durante el partido de la jornada 3 de LaLiga Santander, este sábado en el estadio Martínez Valero, Elche. EFE / Manuel Lorenzo
Manuel LorenzoEFE

Edgar Badia: Gran parada al lanzamiento de Take Kubo, con el empate inicial. En el gol, vendido. No se venció en el penalti a lo Panenka lanzado por Mikel Merino y mantuvo vivo a su equipo hasta el descanso. En la segunda parte fue amenazado por las contras e hizo una intervención destacada a Kubo.

Pol Lirola: Intentó sostenerse en el lateral derecho, sujetando la posición para dar libertad en esa banda, en tareas defensivas, a Álex Collado. Sufrió ante David Silva y Cho, que cayó en varias ocasiones por su banda. Fue sustituido en el descanso por culpa de unas molestias.

Enzo Roco: Acertado en el inicio del partido, pero rompió el fuera de juego cuando Mojica abandonó su demarcación ante a Méndez. Sufrió menos por su zona que su compañero Mojica. Se quedó como único central en la recta final para impedir el segundo de la Real.

Pedro Bigas: Tuvo muchos problemas para tapiar su zona y por el área restringida para su defensa y la de Mojica llegó el 0-1, la jugada del penalti y alguna que otra acción de peligro. Mejor en la segunda parte. Terminó como delantero centro, junto a Lucas Boyé y Pere Milla.

Johan Mojica: En la primera parte apenas se prodigó en ataque y encontró problemas para cerrar su zona junto a Pedro Bigas. En el gol, buscó dejar en fuera de juego a Brais Méndez y terminó liberando su posición. Cometió penalti sobre Cho que no ofreció dudas. Más profundo en la segunda, corriendo su carril hasta el final. Fue amonestado.

Mascarell: El equipo flaqueó en el centro del campo, donde apenas generó juego y tampoco fue capaz de tapar los pases interiores de la Real Sociedad. Fue sustituido, algo poco habitual. El técnico lo justificó por unas molestias en el sóleo.

Gumbau: Vio una cartulina amarilla por un fuerte pisotón, en el centro del campo. Esa amarilla le condicionó en las acciones defensivas. Una vez más, encargado de la estrategia y el balón parado, de donde no se sacó nada. También fue cambiado.

Collado: Ante la ausencia en la conducción de Fidel, lesionado, fue el líder del equipo por segunda jornada consecutiva. Partió como interior por la banda derecha. Se asomó dos veces al área y en una de ellas, en el minuto 17, tuvo la mejor ocasión para el Elche que paró Remiro. Sus dos primeras ocasiones, calcadas a su gol ante el Almería. El caudal ofensivo franjiverde aguantó lo que al catalán le duraron las fuerzas.

Tete Morente: Partió como extremo izquierdo, sin demasiado peligro antes del descanso. Vio una tarjeta por protestar una falta de Zubeldia en el borde del área. Acabó el encuentro sin haber tenido apenas protagonismo ofensivo.

Eze Ponce: Ofreció pelea y entrega, pero lejos del gol. Cayó a zona de tres cuartos para buscar el balón de espaldas y permitir la salida del equipo, sin éxito. Arrancó la segunda mitad con una contra, tras robo de Roger, que envió muy desviado.

Roger Martí: Entró muy bien en el encuentro. Inteligente y bullicioso en el área, pero sin resultado. Metió un centro peligroso al segundo palo, donde no llegó Álex Collado. Una semana más sin gol.

Los cambios de Francisco

Raúl Guti: Mejoró el juego en el centro del campo, con buena conducción y una ocasión clara, la mejor de la segunda parte.

Palacios: El colombiano se vació para dar profundidad por su carril y cerrar esa banda. Recibió el cariño de la grada.

Lucas Boyé: Se le nota falto de forma, pero con el balón en los pies es un verdadero malabarista. Francisco le dejó en el banquillo por las noticias que apuntan a su posible salida.

Pere Milla: Lo intentó sin éxito en ataque.

Domingos Quina: Buscó desequilibrio en la zona de tres cuartos, pero no ofreció vías de peligro con su fútbol.