Mbappé-Messi: un contratiempo inesperado de liderazgo
El Paris Saint Germain daba por perdido al francés y se puso en manos del argentino para el próximo proyecto. Ahora, con los dos en el equipo, se plantea un dilema.
Sobre el final del caso Mbappé poco se puede añadir. Seguirá en el Paris Saint Germain hasta 2025 y después ya se verá si el jugador sigue siendo la estrella que es hoy y si el Real Madrid ha sido capaz de olvidar las largas y arduas negociaciones, que variaron de manera brusca los últimos días de la semana pasada.
Tanto es así que el club parisino daba casi por perdido al joven atacante francés hace tan solo dos meses y se puso a trabajar en un plan alternativo para que el PSG siguiera siendo un club de nivel mundial. Es más, según pudo saber AS, en las últimas semanas el PSG estaba sondeando delanteros con proyección para amortiguar el supuesto golpe del Madrid.
La idea que retumbaba en la planta noble del club francés desde enero pasaba exclusivamente por ceder el poder a Leo Messi y apuntalar un proyecto a su medida. Los primeros tijeretazos estaban cantados y se iban a hacer pasara lo que pasara, como las salidas de Pochettino y Leonardo. El estilo del entrenador no caló en el juego del exazulgrana y el siguiente paso tras su destitución iba a consistir en hacer un equipo en torno a él con jugadores más de su estilo.
Pero la sorpresiva renovación de Mbappé puede hacer cambiar los planes y plantear un dilema en el club a la hora de moldear el proyecto del año que viene y dar los galones en la toma de decisiones. Lo que es seguro es que el argentino seguirá en París el año que viene y la renovación de Mbappé ha sentado bien a su compañero, que le considera vital para seguir ganando títulos con el PSG y alcanzar la gloria al fin en Europa.
Hasta ahora, Messi ha estado un peldaño por encima al de Mbappé en las preferencias del PSG a la hora de apostar en temas comerciales, sobre todo porque el fichaje del exazulgrana ha tenido una conversión asombrosa en las arcas del club en el primer año de relación, vendiendo más camisetas que nadie y ayudando a cerrar acuerdos de patrocinio.
Pero es probable que esta renovación a Mbappé cambie la jerarquía debido a que también es una estrella mundial, pero con más recorrido que el argentino debido a su juventud.
Y lo normal es que el propio Mbappé haya exigido garantías de títulos al PSG para renovar y eso siempre lleva implícito la posibilidad de ser juez y parte del plan para la plantilla del año que viene. De hecho, los primeros movimientos del PSG tras la renovación han ido en sintonía del jugador frances, como la contratación de Luis Campos como director deportivo.
Una participación que fue ofrecida al argentino hace meses y ahora es posible que recaiga en el francés. Sea quien sea, el PSG tiene un gran dilema a la hora de poner nombre a la piedra angular del nuevo proyecto.