Marc Martínez, el héroe en la sombra del Cartagena

Los porteros saben que son más protagonistas para lo negativo que para lo positivo. Una prueba de ello es el caso de Marc Martínez, cancerbero del Cartagena. Su actuación frente al Girona superó el sobresaliente, pero no era la primera vez que el meta catalán merecía esa nota. Ha salvado en más de una ocasión al equipo albinegro, dándole puntos en partidos en los que parecía imposible conseguirlos y en otras evitando un resultado mucho más abultado. Pero, como suele ser habitual, el portero vive a la sombra de compañeros como Rubén Castro o De Blasis, entre otros.

Los de Carrión, con la salvación en la mano y con la meta del playoff muy lejos, vencieron al Girona  con un claro 3-0. Marcaron Pablo Vázquez, Castro y De Blasis, pero el gran protagonista fue Marc Martínez. Amargó la tarde a Stuani y compañía, que una y otra vez se topaban con sus intervenciones. Hizo cerca de media docena de intervenciones, alguna de ellas espectacular, para evitar que el rival se metiese en el partido. Para enmarcar su primer tiempo, en el que dio un recital de paradas ante los intentos de los pupilos de Míchel.

El futuro, en el aire

Marc Martínez forma parte de la historia del Cartagena. Hace tres cursos, en su primera temporada en la ciudad portuaria, puso el candado a su portería y en la final del playoff frente al Atlético Baleares detuvo la pena máxima que permitió al club retornar a Segunda División. Ya en el fútbol profesional, a pesar de la llegada de porteros con la vitola de titular como Chichizola o Bulka, se ganó un puesto con actuaciones que permitieron al equipo alcanzar la permanencia.

Este curso el nivel de Marc Martínez se mantiene, está demostrando que es uno de los mejores porteros de la categoría. Es verdad que el equipo de Carrión es de los más goleados, pero si no fuese por el arquero de Barcelona la sangría sería mucho mayor. Sus buenas actuaciones no están pasando desapercibidas y hay muchos clubes interesados en él, pues acaba contrato en el Cartagena. Su continuidad es primordial para el futuro proyecto, pues hay pocos cancerberos con un rendimiento tan alto.