Pol Lorente: "Encontramos un grupo comprometido y dispuesto"

El preparador físico Pol Lorente acompaña a Javier Aguirre desde su estancia en Egipto y desde entonces forman equipo técnico, habiéndose convertido el catalán (Berga-Barcelona, 1988) en hombre de confianza del mexicano. Lorente es el preparador físico del equipo mallorquinista, aunque su cometido va más allá puesto que es licenciado en Ciencias de la Actividad Física además de poseer el título de entrenador por lo que, además, es asistente de Aguirre en el cometido técnico-táctico.

En declaraciones a los medios del club balear, Lorente afirma que tiene "la fortuna de coincidir con Aguirre en la aventura egipcia, él buscaba un preparador físico y por algunas vías le llegó mi nombre, nos conocimos, hablamos de todo menos de fútbol y vimos que podíamos encajar".

La llegada a Mallorca con el equipo flirteando con el descenso es todo un reto y Lorente asegura que se encontraron "un grupo sano, comprometido y dispuesto, eso es lo más relevante". Particularmente, el catalán apunta que procura "tener una aproximación muy personal y directa con el futbolista para intentar conocer a la persona con la que vas a trabajar y a partir de esa aproximación, se puede exigir un poco más al profesional".

Llegar para conseguir la permanencia con solo 9 partidos por delante es todo un reto y Lorente reconoce que es poco tiempo. Tras perder en el estreno con el Getafe y ganar después al Atlético de Madrid, el equipo bermellón salió de los puestos de descenso, algo que ahora se debe intentar mantener, pero ante tan poco espacio de tiempo para lograr el objetivo, Lorente reconoce que lo más inmediato ha sido potenciar los méritos del equipo y corregir errores: "Cuando el tren está en marcha es muy difícil cambiar el trayecto y estamos intentando potenciar las cosas que se están haciendo bien y poniendo el sello en aquello que consideramos imprescindible para nosotros cambiando todo lo que se podría hacer mejor, y eso es un proceso lento porque nos apremia el resultado, así que lo necesitamos inmediatamente".

Dicho esto, parece clave el factor emocional en un cuerpo técnico que cuenta con un integrante mallorquín que conoce la casa como es el segundo entrenador, Toni Amor sobre lo que Lorente apunta que "teniendo a Toni como compañero, siempre seguíamos al Mallorca allí donde estuviéramos, en Leganés o en México, y siempre nos hablaba de las pequeñas cosas del Mallorca, y efectivamente cuando uno llega a la isla, ve esas cosas, la Ciudad Deportiva, el estadio, las anécdotas que te cuentan los aficionados, y ese componente emocional, que existe, hace que uno se sienta como en casa".

Sobre el futuro, Pol Lorente lo tiene claro: "Mi deseo es estar aquí todo el tiempo posible y que el RCD Mallorca siga en Primera División".