Can Misses quiere seguir siendo un fortín ante el Leganés
El Ibiza se mide al conjunto pepinero en casa, donde todavía no ha perdido en la segunda vuelta. Los dos conjuntos llegan plagados de bajas.
El Ibiza vuelve a casa, a Can Misses, estadio en el que todavía no ha perdido este año, para enfrentarse este sábado al Leganés (16:00 en Movistar). Los isleños quieren hacer bueno el punto conseguido en Ponferrada venciendo a un adversario que desea seguir escalando posiciones en la tabla para empezar a otear la zona de 'play-off' de ascenso a Primera (sigue el partido en directo en AS.com).
El bloque ibicenco, que aún no ha cerrado la permanencia matemática, mira hacia la zona noble de la clasificación. Se encuentra a cuatro puntos de la sexta posición, que ocupa el Girona. El conjunto que entrena Paco Jémez sigue haciendo la goma con los puestos de promoción, fruto de lo exigente que es LaLiga SmartBank. No acaba de engancharse de lleno con el grupo de privilegio, pero seguirá intentándolo hasta el final.
El quebradero de cabeza para el técnico, una semana más, serán las múltiples bajas con las que cuenta. Siguen los problemas en la línea defensiva, con las ausencias de los centrales David Goldar y Álex Gálvez, por motivos físicos. Por el mismo motivo continuarán fuera Javi Pérez y Álvaro Jiménez. A ellos hay que sumar la baja, por acumulación de tarjetas amarillas, de Manu Molina, jugador que es un fijo en la medular celeste. El sustituto del onubense parece que será Javi Lara, jugador también de mucha clase y amplia experiencia que siempre aporta su buen criterio cuando juega.
Llega renqueante el delantero Sergio Castel, que podría entrar en la convocatoria y a lo mejor disponer de minutos, pero no es una opción clara, según expresó el preparador cordobés en rueda de prensa. Rubén, que no pudo completar el choque frente a la Ponfe, está disponible. El máximo goleador de los celestes está sufriendo una fascitis plantar que frenó en seco su buen momento. Es un jugador de difícil recambio y al que el Ibiza siempre echa de menos.
Se espera, por tanto, un once titular similar al que jugó un buen partido en El Toralín, feudo en el que el Ibiza pudo sacar un punto y cortar así una racha de dos derrotas consecutivas fuera de casa.
Supone el viaje a Can Misses para el Leganés reto mayúsculo. No sólo por lo lanzado de un rival en momento de forma dulce, sino por las múltiples aristas en forma de distintos exámenes que supondrá el duelo para Nafti y sus muchachos. Por ejemplo, será buena manera de testar si la solidez defensiva que han demostrado en los últimos seis partidos de racha ininterrumpida (14 puntos de 18 posibles, invictos desde su tropiezo en Burgos) es tan sólida como hasta ahora.
En ese periodo el Leganés sólo ha encajado dos goles y, además, ha visto reducido en un 20% los remates a puerta. Con el Ibiza de Paco Jémez convertido en ejemplo de equipo ofensivo, la zaga madrileña deberá sostenerse, además, con menos mimbres de los habituales. De las seis bajas para este duelo, cuatro son directamente defensas que bien podrían ejercer de titulares en cualquier partido. A saber: Bruno, Palencia, Omeruo y Quintillà. De hecho, los tres primeros forman parte del once que más minutos ha jugado en Liga con el Lega y el último se había consolidado como lateral zurdo titular. Las otras dos bajas son Perea (ausente desde precisamente la goleada en Burgos) y Borja Garcés. Un drama de enfermería.
Nafti ha convocado a 22 hombres con sólo cinco defensas del primer equipo y Rubio, lateral del B, como principal novedad. Arnáiz, tocado de las rodillas, ha viajado, aunque está por ver si el franco-tunecino le concede descanso o apuesta por mantenerlo ahora que ya ha igualado a Randjelovic como pichichi con cinco goles. El serbio, Naim y Rober Ibáñez (éste, el único fichaje que aún no ha debutado de titular) podrían reemplazarle.
El resto pivotará entre la solución de las rotaciones masivas para darle descanso o el mantenimiento de buena parte del equipo que ha consolidado la buena racha. "Puntuar siempre es bueno", avisó Nafti preguntado en la previa sobre si un empate sería un resultado positivo. El morbo de ver a Miguel Ángel Guerrero ante sus ex también condimentará el duelo desde la perspectiva visitante.