Luis Enrique-Mancini, pelea por el balón en semifinales de la Euro

España es la mejor con el balón, pero Italia le sigue a poca distancia. La Eurocopa se mueve entre los contragolpeadores y los dominadores, y tanto Luis Enrique como Mancini han elegido la segunda opción. La Roja se mueve al ritmo que marca Busquets, flanqueado por Koke y Pedri, mientras que la Squadra Azurra fía su juego a Verratti y Jorginho, ayudados por Barella.

El de mañana será el cuarto enfrentamiento consecutivo de Italia y España en el Campeonato de Europa de Selecciones. La racha comenzó en 2008 con la recordada tanda de penaltis de Cesc. Ambas selecciones volvieron a enfrentarse en la gloriosa final de 2012, con Casillas pidiendo la hora por respeto al equipo italiano, que se tomó la revancha en 2016, eliminando a España en la Eurocopa de Francia.

Pero en esos tres partidos hubo un equipo dominador, España, y otro que buscó la contra, que fue Italia. Sobre todo en el tercero de los choques, disputado en París, en el que Antonio Conte recurrió con éxito a los tres centrales para frenar a la Selección, que ya había iniciado su declive dos años antes, en el Mundial de Brasil. Italia ganó, pero eso no fue lo peor. Lo peor fue el comportamiento de Conte, muy irrespetuoso con el banquillo de Del Bosque.

Centrales. Pero ahora estamos ante otra Italia. Mancini representa todo lo contrario a Conte, dentro y fuera del campo. El que fuera '10' de la Sampdoria entrena como juega: todo talento. Quiere que su equipo tenga la pelota y domine. Sufre sin el balón.

El problema es que enfrente estará la España de Luis Enrique que, sin llegar a los niveles de la de Luis Aragonés, tiene unos números que asustan. España es la líder en posesión del campeonato con el 67,2 por ciento, mientras Italia es la tercera, por detrás de Alemania, ya eliminada con el 55,8 por ciento. España es la primera en precisión en el pase con un acierto del 89,4 por ciento, mientras que Italia es la quinta con el 88,4.

Sólo hay un dato favorable a los italianos en la comparación con España: La Azzurra dispara más a la portería de sus rivales, hasta 101 veces por las 95 de España, pero con una hora menos de juego tras las dos prórrogas que superó el equipo de Luis Enrique.

La clave de Italia, más allá de ese buen manejo del balón, son sus dos experimentados centrales. Chiellini (36 años) y Bonucci (34) mantienen vigente la mítica solidez de las defensas italianas. Pero España tiene una buena solución porque uno de sus puntos fuertes es el juego por las bandas. Pau Torres, Alba y Pedri forman un triángulo mágico en la izquierda y Laporte, Dani Olmo (Sarabia está lesionado) y Koke hacen lo mismo por la derecha. El España-Italia de Wembley también será un duelo táctico, y por eso tanto Mancini como Luis Enrique trataran de hacer buena la máxima de que la mejor defensa es un buen ataque. Y para eso lo primero es tener la posesión, ser el dueño de la pelota.