Puado señala a Sapporo
La convocatoria del delantero del Espanyol para los Juegos Olímpicos se apunta como segura salvo debacle, lo que postergará su retorno e incluso daría aire a su renovación.
"¡¡¡Un año espectacular!!!", exclamaba Javi Puado este pasado martes a través de su cuenta personal en las redes sociales, para poner colofón a la mejor temporada de su carrera deportiva. Acaba de comenzar vacaciones el atacante del Espanyol, después de haber debutado con la Selección española –y con gol, frente a Lituania, el pasado día 8– y de entrenarse unos días en la burbuja de Las Rozas por si se declaraban más casos de COVID-19 en la Absoluta, pero la próxima campaña ya está muy presente. Primero, porque a día de hoy no es seguro al cien por cien dónde jugará. Y segundo, porque tiene todos los números de comenzarla cumpliendo un sueño. Otro más.
Están convencidos en el Espanyol de que –a diferencia de lo que le ha sucedido a Matías Vargas con Argentina– Luis de la Fuente, el seleccionador Sub-21, contará con Puado para incluirlo en la convocatoria de futbolistas que representarán a España en los Juegos Olímpicos, que en este caso se concentrará no en Tokio sino a más de mil kilómetros, en Sapporo, donde disputará al menos dos partidos, frente a Egipto y Australia, más Argentina (sin el 'Monito') en Saitama. No en vano, el técnico sentía ya predilección por el barcelonés antes de su gran irrupción en la primera plana del fútbol.
Con De la Fuente, Puado ha sido titular indiscutible en nueve encuentros de esta última campaña, cuatro de clasificación para la Eurocopa y cinco de la fase final, en los que ha anotado tres goles. Solo se perdió un choque ante Macedonia del Norte, en septiembre, del que cayó a última hora pese a figurar en la lista inicial.
Dado que el delantero ha comenzado las vacaciones más tarde que sus compañeros, que la competición de fútbol en los Juegos comenzará el 22 de julio y que todos los deportistas irán con un cierto margen, además de la preparación previa, es harto probable que Puado no se incorpore a la pretemporada del Espanyol hasta después de la competición olímpica, que en el mejor de los casos concluiría el 7 de agosto. Es decir, ya volvería para la semana del inicio de LaLiga. Eso, siempre que siga en el Espanyol, con el que mantiene contrato en vigor hasta 2022.
Porque, de rebote, la casi segura marcha de Puado a los Juegos Olímpicos daría aire a su proceso de renovación en el hipotético caso de que no se hubiera desencallado en las próximas semanas, como es deseo de todas las partes. El propio consejero delegado del Espanyol, José María Durán, manifestó este martes que el club desearía cerrarla cuanto antes, pero que no caerán en precipitaciones. Unos días atrás, fue el director deportivo, Francisco Joaquín Pérez Rufete, el que aventuró en AS que las negociaciones no tienen por qué convertirse en un "culebrón".